La imagen de dos mujeres besándose no debería ser noticia, salvo que una de ellas sea la hija del presidente de Camerún, un país donde se persigue y castiga al colectivo LGTBIQ+. Una fotografía, publicada en su cuenta de Instagram, Brenda Biya declara su amor, sea cual a sea, hacia la mujer que la acompaña en la foto.

La fotografía se ha convertido en un icono, en un gesto histórico para organizaciones en defensa de los derechos humanos de Camerún. "Este valiente e histórico discurso marca un punto de inflexión en la lucha por los derechos y la aceptación de las minorías sexuales en Camerún", han expresado organización del colectivo LGTBIQ+ en el país africano.

Minorías que, a diferencia de la hija del Presidente de la República, quien reside fuera del país, se enfrentan a penas de prisión de hasta 5 años por mantener relaciones con personas del mismo sexo. "No se trata de personas que disfruten de los mismos derechos que los demás", ha asegurado Alice Nkom, Abogada y activista por derechos LGTBIQ+ en Camerún.

Y esa es precisamente la crítica que se le hace a Brenda Bía, que su activismo, intencionado o no, lo realiza desde fuera de su país y en una situación personal privilegiada, como recordaban en 2019 desde la televisión.

"Mientras ella está en EE. UU. viviendo en una mansión, la gente no tiene comida. La gente está pasando por esto en Camerún", critica un periodista. De momento, no hay reacción oficial por parte del gobierno de Camerún a este beso que ya es historia de su país.