Biden desea suerte al Gobierno de Trump, pero advierte: "Se está gestando una oligarquía en EEUU"

El presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, ha asegurado este miércoles, en su discurso de despedida a tan solo cinco días de que Donald Trump asuma el poder, que "se está gestando una oligarquía" en su país. "En estos momentos, se está gestando una oligarquía en Estados Unidos construida sobre una concentración extrema de riqueza, poder e influencia", ha advertido el mandatario demócrata desde el Despacho Oval de la Casa Blanca.

Biden se ha confesado "profundamente preocupado" por lo que define como una "peligrosa concentración de poder en manos de unos pocos individuos ultrarricos". "Si el abuso de ese poder no se detiene ahora, las consecuencias serán graves", ha avisado. Esta oligarquía emergente, ha ahondado "amenaza directamente nuestra democracia, los derechos y libertades fundamentales, y la igualdad de oportunidades para que todos puedan avanzar".

Biden, de 81 años, se despidió con este discurso tras cumplir con un solo mandato en la Casa Blanca que quedará en la historia encapsulado entre los dos periodos de Trump, a quien no ha citado este miércoles, pero al que ha aludido en varios puntos de su intervención, en la que ha deseado "suerte" a la Administración entrante.

"Para el pueblo estadounidense, deseo éxito a la Administración entrante porque quiero que Estados Unidos triunfe. Por eso, he asumido mi deber de garantizar una transición pacífica y ordenada del poder, de asegurar que lideremos con el poder de nuestro ejemplo. No tengo ninguna duda de que Estados Unidos está en condiciones de seguir teniendo éxito", ha manifestado Biden, que ha aseverado a su vez que el poder del presidente "no es ilimitado".

"El poder del presidente no es ilimitado, no debe serlo, y en una democracia, la concentración de poder y riqueza también representa un gran peligro", ha aseverado. "Socava el sentido de unidad y propósito común, genera desconfianza y división. Participar en nuestra democracia se vuelve agotador, incluso desilusionante, y la gente siente que no tiene oportunidades", ha añadido.

Biden también ha aprovechado esta oportunidad, una de las últimas que tendrá de hablar en público como presidente, para hacer balance de su gestión en los últimos cuatro años. "Sabemos que llevará tiempo sentir el verdadero impacto de todo lo que hemos logrado juntos, pero las semillas están plantadas, y con el tiempo crecerán y darán frutos durante décadas", ha afirmado, citando la creación de empleo, el alto al fuego en Gaza anunciado este mismo miércoles, el fortalecimiento de la OTAN, la puesta al día en la competencia con China y "mucho más".

El mandatario, que el próximo lunes, 20 de enero, entregará el mando a Trump, ha hecho un llamamiento al pueblo estadounidense a "ser guardianes" y "mantener la fe" en el país. "Todavía creo en la idea por la que esta nación existe, una nación donde la fortaleza de nuestras instituciones y el carácter de nuestra gente importan y deben perdurar", ha manifestado. "Ahora es su responsabilidad estar de guardia. Que todos ustedes sean los guardianes de la llama. Que mantengan la fe", ha concluido.