Boris Romanchenko, un superviviente al holocausto nazi, murió el pasado viernes a causa de un bombardeo en su casa de Járkov, Ucrania. La Fundación Memorial Buchenwald and Mittelbau-Dora, de la que Romanchenko fue vicepresidente del Comité Internacional Buchenwald-Dora, compartió la triste noticia en sus redes sociales.
"Según supimos por sus familiares, nuestro amigo Boris Romanchenko, que sobrevivió a los campos nazis de Buchenwald, Peenemünde, Dora y BergenBelsen, murió el pasado viernes en la explosión de una bomba en su casa de Járkov. Estamos profundamente entristecidos", se puede leer en el mensaje de Twitter en ucraniano.
A sus 96 años, se despide de este mundo tras otra masacre, esta vez la del pueblo ucraniano a manos del ejército de Putin. Boris Romanchenko dedicó su vida, tras dejar atrás las torturas nazis, a trabajar intensamente en la memoria de aquellos crímenes y a que atrocidades así jamás volvieran a repetirse.
En 2012, Boris Romanchenko -segundo desde la derecha en la foto- leyó el juramento de Buchenwald para "crear un mundo nuevo donde reine la paz y la libertad", durante la celebración del aniversario de la liberación del campo de concentración de Buchenwald, en Alemania.
El mito de la "desnazificación" de Ucrania
Boris Romanchenko consiguió sobrevivir a los nazis, pero no ha podido hacerlo a los ataques rusos. Es contradictoria esta tragedia con el mensaje del presidente ruso Vladímir Putin sobre "desnazificar" Ucrania.
El Kremlin ha intentado, en varias ocasiones, justificar su invasión al pueblo ucraniano dando como excusa la intención de "desnazificar" y "desmilitarizar" el país. Además, les acusan de perseguir el idioma ruso, muy presente en muchas zonas del país.