Al menos tres personas han fallecido en la región italiana de la Toscana (centro) como consecuencia del paso del temporal 'Ciarán', que también ha dejado graves incidencias en otros países de Europa Occidental. Así, el presidente de la Toscana, Eugenio Giani, ha informado de la muerte de cinco personas y cuatro desparecidos, principalmente a causa de las riadas provocadas por la tormenta.
"Nunca antes habíamos registrado tanta lluvia en tan pocos minutos", ha publicado Giani en su cuenta de la red social X, antes Twitter. Según las previsiones de los servicios de Protección Civil italianos, la tormenta se desplazará desde el norte, en alerta roja, hacia el sur del país, que hasta ahora se encontraba en alerta amarilla y naranja, dependiendo del municipio.
Con estas últimas víctimas mortales ya son más de una decena las personas que han perdido la vida en Europa por el paso de Ciarán, que ha dejado fuertes lluvias y vientos huracanados en el Canal de la Mancha, España y Bélgica, donde ha provocado además decenas de heridos, cortes eléctricos, alteraciones en el transporte y cierre de escuelas, entre otras incidencias.
El temporal, uno de los ciclones extratropicales más virulentos de los últimos tiempos en Europa occidental, se cobró la vida de dos personas en Francia, dos en Bélgica, una en España y otra en Países Bajos.
La primera víctima que provocó Ciarán en el país galo, donde se han registrado vientos de más de 200 km/h, fue un hombre, conductor de un camión, al que se le cayó un árbol encima en el departamento de Aisne, según confirmó el ministro de Transportes francés, Clément Beaune.
Hacia el mediodía del jueves, la caída desde un primer piso de otro hombre, de 70 años y que fue hallado ya en parada cardiorrespiratoria por los servicios de emergencias tras haberse precipitado desde el balcón arrasado por el vendaval en la localidad normanda de Le Havre, elevó a dos la cifra de fallecidos en Francia a causa del temporal.
Además, en este país se contabilizaron 16 heridos, entre ellos una persona en estado grave en un campus universitario en la ciudad de Roubaix, fronteriza con Bélgica, y siete bomberos, que hasta primera hora de la tarde hicieron más de 3.500 intervenciones en las zonas afectadas por la borrasca.
Por otro lado, 1.315 personas tuvieron que ser desplazadas, especialmente de cámpings y de áreas de acogida, así como de varias viviendas de la ciudad de Brest (Bretaña, noroeste) debido a la caída de una grúa.
En Bélgica, un niño de cinco años perdió la vida después de que una rama se le cayera encima cuando jugaba en un área infantil de un parque en la ciudad de Gante, mientras que otro niño, de tres años, resultó herido, según informó la radiotelevisión pública RTBF.
En esa misma localidad, otra persona perdió la vida y su acompañante se rompió una pierna cuando un árbol se desplomó sobre ellos mientras paseaban a mediodía por el céntrico Parque Citadel, según avanzó el diario Het Laatste Nieuws y confirmó la policía.
Cerca de Amberes, en el norte de Bélgica, una persona se encuentra grave tras derrumbársele encima un muro de contención de un almacén, mientras que en Bruselas los bomberos rescataron del canal fluvial a un herido grave y a otras dos personas que se lanzaron a socorrerle y que están fuera de peligro, si bien no están claras ni las circunstancias del incidente ni su relación con el temporal.
El desplome de árboles fue también la causa de la muerte de una persona en Países Bajos, en el municipio de Venray (en la provincia de Limburgo) y de una joven de 23 años en Madrid, donde en una céntrica calle de la capital un árbol de unos 20 metros cayó esta tarde sobre la mujer mientras cruzaba por un paso de peatones.
En España el temporal provocó un viento con rachas muy fuertes en el norte y centro del país e incluso huracanadas en zonas de montaña y litorales, donde la velocidad llegó a alcanzar los 165 km/h; mientras que en Países Bajos las ráfagas de más de 110 kilómetros por hora en diferentes provincias de la costa neerlandesa.