El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha advertido de que "cada miembro de Hamás es hombre muerto", al anunciar un Gobierno de emergenciacon el líder de la oposición y ex ministro de Defensa Benny Gantz, mientras dure la guerra.
"Dejamos de lado cualquier otra consideración por los ciudadanos de Israel", ha afirmado el primer ministro, en el quinto de día de guerra con las milicias palestinas de Gaza, durante un mensaje conjunto con Gantz y el ministro de Defensa, Yoav Gallant.
A su vez, el ministro de Defensa, ha dicho que van "a destruir y matar completamente a Hamás, el ISIS de Gaza. Se esfumarán de la Tierra, ya no existirán, no aceptaremos que los niños y bebés israelíes sean asesinados y todo siga como siempre", al asegurar que las zonas israelíes aledañas a la Franja han sido aseguradas y ahora sus tropas "se concentran en la ofensiva".
Por su parte, Ganzt ha comentado que "el Estado de Israel está enfrentando uno de sus momentos más difíciles", con sus "familias que han sido asesinadas y secuestradas por un enemigo sin piedad que debe ser eliminado". "El hecho de que estemos aquí unidos, codo a codo, es un mensaje muy claro para el enemigo, y aún más importante, es un mensaje para todos los ciudadanos de Israel", ha añadido.
Así será el Gobierno de emergencia
La decisión de formar un gobierno de emergencia tiene el objetivo de hacer frente a la guerra con las milicias palestinas de Gaza. El acuerdo indica que Gantz, junto al exministro de Justicia Gideon Saar; otro exjefe del Estado Mayor del Ejército, Gadi Eisenkot, y otros dos diputados se integrarán al gabinete político y de seguridad del Gobierno mientras dure la guerra.
Los cinco son miembros del partido de centro-derecha Unidad Nacional, comandado por Gantz. El gabinete de gestión de la guerra estará integrado por Netanyahu, Gantz y el actual ministro de Defensa, Yoav Gallant. Además, se reservará un sitio en el gabinete de gestión de la guerra para Yair Lapid, quien junto a Gantz son los dos miembros más fuertes de la oposición a la coalición de Netanyahu en el Parlamento.
Las negociaciones para la inclusión de Lapid aún no han concluido y medios locales explican que se debe a desacuerdos con los socios ultraderechistas de coalición de Netanyahu. Por último, el acuerdo establece que, mientras dure la guerra, no se podrán impulsar proyectos de ley ni tomar decisiones gubernamentales que no se vinculen al conflicto con las milicias.