La Policía tailandesa ha asegurado que están convencidos de que la muerte de Edwin Arrieta no fue un accidente como aseguró Daniel Sancho. Una conclusión a la que han indicado que han llegado tras realizar una investigación.
Por tanto, han asegurado que Daniel Sancho cometió un asesinato premeditado, algo que en Tailandia suele estar condenado con la pena de muerte.
La abogada de la familia de Daniel Sancho, Carmen Balfagón, ha reconocido que los padres se encuentran "francamente mal" tras las conclusiones a las que han llegado las autoridades tailandesas. Además, ha reconocido que ya eran conscientes de que si se concluía que había sido premeditado esta iba a ser la pena a la que iba a tener que enfrentarse.
"No tengo duda de que le van a imponer la pena de muerte", ha reconocido Carmen Balfagón, indicando que ahora la postura que deben adoptar es la de "respeto a la investigación policial y a lo que se haga a nivel judicial".
Pese a que está convencida de que será condenado a pena de muerte, la abogada ha confesado que no cree que sea una pena que se vaya a ejecutar. "Hay que trabajar para rebajarla a nivel formal", ha destacado.
Lo cierto es que, de ser así, Daniel Sancho no sería el primer español en ser condenado a la pena capital. En 2016, el catalán Artur Segarra fue detenido por el asesinato de su compatriota David Bernat en el país del sudeste asiático.
Con una orden de busca y captura desde España desde 2015 por evasión de la justicia, Segarra fue acusado de secuestrar, torturar y descuartizar al empresario David Bernat, también catalán, y tratar de deshacerse de su cadáver tirándolo a un río de la capital, Bangkok. Unos hechos con los que fue condenado a pena de muerte.
Sin embargo, en 2020 el monarca tailandés le concedió un perdón real. De esta forma, vio reducida su condena a la cadena perpetua, lo que abrió la puerta a que el reo iniciara la solicitud de traslado a una cárcel en España. De momento, todavía se encuentra en el penal de máxima seguridad Bang Kwang de Bangkok pendiente de su futuro traslado, del que todavía no hay fecha.