El origen del 'Signalgate'
La Casa Blanca concluye que Waltz metió a un periodista en el chat secreto porque tenía su número con otro nombre
Sí, pero... La investigación interna apunta que el consejero tenía guardado desde hace meses el número del periodista bajo el contacto del entonces portavoz de campaña de Trump y culpa de ello a una función de su iPhone.

Resumen IA supervisado
El consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Mike Waltz, incluyó accidentalmente al periodista Jeffrey Goldberg en un chat ultrasecreto de Signal, donde se discutían detalles de un ataque contra Yemen. Según una investigación interna de la Casa Blanca, el error se debió a que el móvil de Waltz guardó el contacto de Goldberg bajo el nombre de Brian Hughes, portavoz de campaña de Trump, debido a una "sugerencia de actualización de contacto" del iPhone. Aunque el presidente Trump consideró cesar a Waltz, más molesto por la relación con Goldberg que por la brecha de seguridad, finalmente no lo hizo.
* Resumen supervisado por periodistas.
¿Cómo llega el consejero de Seguridad Nacional de Estados Unidos a meter a un periodista en un chat ultrasecreto? La culpa, según la Casa Blanca, la tuvo su teléfono móvil. Es la conclusión de una investigación interna, avanzada por 'The Guardian', sobre la concatenación de errores que llevó a Mike Waltz a incluir al periodista Jeffrey Goldberg en una conversación de Signalen la que el círculo más cercano a Donald Trump debatía los pormenores de un ataque contra Yemen.
Tras el escándalo, y después de que la cabeza del consejero estuviera a punto de rodar, ahora la Casa Blanca tiene una explicación para lo ocurrido: Waltz tenía guardado el contacto del periodista bajo el nombre de otra persona a quien sí pretendía añadir al chat. Un error que se remontaría a meses atrás, en plena campaña electoral.
Según fuentes conocedoras de la investigación interna citadas por el diario británico, la Casa Blanca ha llevado a cabo una "evaluación forense" de lo sucedido y su conclusión es que el móvil de Waltz grabó el número de Goldberg -redactor jefe de 'The Atlantic', una publicación que Trump odia- como si fuera de Brian Hughes, entonces portavoz de campaña del republicano.
Al parecer, Goldberg envió en octubre un email a la campaña de Trump sobre un reportaje que estaba escribiendo y Hughes, actual portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, reenvió el contenido de ese correo a Waltz en un mensaje de texto... incluido el bloque de la firma de periodista con su número de teléfono. Y Waltz, por lo visto, guardó ese número bajo el contacto de Hughes.
La Casa Blanca, sin embargo, atribuye el error a una "sugerencia de actualización de contacto" del iPhone de Waltz. Una función, afirman, que añade un número nuevo a un contacto existente si detecta que puedan estar relacionados.
De esta forma, la Administración Trump ya tiene su explicación al conocido como 'Signalgate', una polémica por la que el presidente se habría planteado cesar a Waltz, según 'The Guardian', más enfadado por el hecho de que tuviera el contacto de Goldberg, a quien detesta, que por la surrealista brecha de seguridad que supone debatir planes de guerra en una aplicación como Signal. De acuerdo con el mismo medio, sin embargo, no lo hizo precisamente para no darle esa satisfacción a un medio crítico.