Guerra comercial

China responde a Trump con aranceles del 10 al 15% a ciertos productos de EEUU

Sí, pero... El presidente estadounidense ha accedido a suspender los aranceles a México y Canadá, al menos de momento, pero tiene otro frente abierto en su guerra comercial: China.

Fotografía de archivo de 2017 del presidente de EEUU, Donald Trump, y el de China, Xi Jinping.Fotografía de archivo de 2017 del presidente de EEUU, Donald Trump, y el de China, Xi Jinping.EFE/Roman Pilipey

La guerra comercial iniciada por Donald Trump no ha llegado a su fin con el acuerdo alcanzado con México y Canadá para paralizar, al menos de momento, sus prometidos aranceles. El mandatario republicano tiene otro frente abierto: China, que este martes ha anunciado que impondrá aranceles del 10 al 15% a ciertos productos de Estados Unidos a partir del 10 de febrero.

Una decisión que llega después de que hayan entrado en vigor los gravámenes adicionales del 10% impuestos por el presidente estadounidense a los productos chinos. Asimismo, Pekín también ha anunciado nuevos controles a las exportaciones de minerales clave y ha lanzado una investigación antimonopolio contra el gigante tecnológico estadounidense Google, de acuerdo con la agencia estatal Xinhua, citada por Efe.

En concreto, de acuerdo con un comunicado de la Comisión Aduanera del Ejecutivo chino, China aplicará un arancel del 15% a productos de carbón y gas natural licuado, así como uno del 10% a los de petróleo crudo, maquinaria agrícola, automóviles de gran cilindrada y camionetas. "En el caso de las mercancías importadas que sean originarias de los Estados Unidos, se aplicarán los aranceles correspondientes sobre la base de las tasas arancelarias vigentes", agrega.

Los aranceles, que Trump justifica por la entrada de fentanilo en el país norteamericano, "violan gravemente las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC)", reza la nota de China, que ya anunció que llevaría la medida ante esta organización, y "no abordan los problemas de Estados Unidos sino que también socava la cooperación económica y comercial entre China y Estados Unidos".

Investigación contra Google

A su vez, la Administración Estatal de Regulación del Mercado de China ha anunciado en otro comunicado que ha iniciado una investigación formal sobre el gigante tecnológico estadounidense Google por presunta violación de la Ley Antimonopolio de China, sin ofrecer más detalles.

Por último, la cartera de Comercio ha anunciado controles de exportación de artículos relacionados con el tungsteno, el telurio, el bismuto, el molibdeno y el indio. El Ministerio señala en un comunicado que toma la decisión "de acuerdo con la ley", con el fin de "salvaguardar la seguridad y los intereses nacionales" y para "cumplir con las obligaciones internacionales como la no proliferación".

La cartera agrega que ha añadido a dos empresas estadounidenses, Pvh Group y Illumina Inc, a la lista de entidades no confiables por "violar los principios del mercado, interrumpir las transacciones normales con empresas chinas, adoptar medidas discriminatorias contra empresas chinas y dañar gravemente los derechos e intereses legítimos de las empresas chinas".

Nuevo capítulo de la guerra comercial

La víspera, Trump accedió a retrasar un mes los aranceles a las importaciones de Canadá y México, pero las tarifas del 10% a las importaciones chinas ya han entrado en vigor. El dirigente estadounidense adelantó que hablaría con responsables chinos en los próximos días y que era posible que hubiera una pausa.

Pekín, a su vez, había prometido el domingo represaliaspara "salvaguardar firmemente" sus derechos e intereses, además de presentar una demanda ante la OMC por las "prácticas ilícitas" estadounidenses. En su primer mandato, Trump ya mantuvo una relación tensa con el gigante asiático e impuso varias tandas de tarifas por valor de unos 370.000 millones de dólares anuales, a lo que China respondió con gravámenes a las exportaciones estadounidenses.

La guerra comercial emprendida por Trump ha sido bautizada por 'The Wall Street Journal' como la "más tonta de la historia". Además de los aranceles a China, México y Canadá, que ya respondió con tarifas del 25% a los productos del país vecino, el mandatario republicano ha asegurado que planea hacer lo mismo con la Unión Europea, aunque aún no ha aclarado cuándo ni en qué términos.

El bloque comunitario, no obstante, está preparado para responder "firmemente" si EEUU acaba aplicando aranceles a los productos europeos. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, así lo avanzaba este mismo lunes tras una reunión de los líderes comunitarios en Bruselas, que están alineados en este sentido.

El presidente francés, Emmanuel Macron, cree que Europa "tiene que reaccionar y hacerse respetar" si es atacada en lo comercial y el canciller alemán, Olaf Scholz, indicó que los ataques en política aduanera deben responderse con políticas aduaneras. También el ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, manifestaba el lunes que la Unión "debe responder como un solo agente" a la amenaza arancelaria de Trump para reforzar su posición negociadora.

El éxito que pueda tener Trump en esta guerra, en todo caso, es dudoso. Para los expertos, acabarán "perdiendo todos". "No lo conseguirá si otros países responden de la misma manera. Solamente puede ganar si las amenazas se quedan en amenazas y nadie responde", indicaba Massimo Cermelli, profesor de Economía. El propio presidente ya ha admitido que su cruzada arancelaria puede causar "dolor" a corto plazo a los estadounidenses, pero de momento parece no importarle.