Un juez de EEUU condenó a cadena perpetua al neonazi que embistió con su vehículo a una multitud durante las protestas de la ciudad de Charlottesville, Virginia; un suceso que se cobró la vida de una mujer y dejó decenas de heridos.
James Alex Fields Jr., de 22 años y originario de Ohio, ya se había declarado culpable de los 29 delitos de odio que se le imputaban, incluido el asesinato de la joven Heather Heyer, que falleció tras ser atropellada por el acusado.
Antes de recibir la sentencia, Fields Jr. pidió disculpas por lo sucedido, según medios locales. El acusado compareció vestido con un traje de presidiario y con las muñecas esposadas en una de las salas de la corte del distrito oeste de Virginia, en Charlottesville, donde se celebró el proceso judicial.
Durante el juicio, los abogados de Fields Jr. habían pedido al juez que tuviera compasión del acusado, ya que ha tenido problemas mentales desde niño y aseguraron que no dirigió su coche intencionadamente contra la multitud que protestaba pacíficamente en contra de una marcha neonazi.
Frente a ello, la Fiscalía describió al procesado como un racista que no guarda "ningún remordimiento" por su crimen y por las secuelas psicológicas y físicas de sus víctimas. En su escrito de acusación, la Fiscalía consideró que los "crímenes del acusado son tan horrendos y los ataques a los inocentes fueron tan graves", que cualquier factor atenuante -como la incapacidad mental del acusado- no debe tenerse en cuenta y debe fijarse la sentencia máxima.
Fields Jr. acudió a Charlottesville para participar en una marcha llamada 'Unir a la derecha'. Entonces, un grupo de neonazis se manifestó por las calles de Charlottesville con antorchas y entonando consignas xenófobas con el objetivo de protestar por la retirada de una estatua de Robert E. Lee, un general esclavista de la Confederación durante la guerra civil de EE.UU.
Esa protesta fue contestada por una marcha antifascista que pedía a los neonazis que se fueran de Charlottesville. Fue en ese momento cuando Fields tomó su coche y atropelló a la multitud de los contramanifestantes, tal y como muestran vídeos y fotografías que captaron el momento.
En ese contexto, el presidente de EEUU, Donald Trump, provocó una gran polémica al responsabilizar de la violencia tanto a los grupos neonazis como a los manifestantes de izquierda y, además, llegó a considerar que había gente "muy buena" entre los supremacistas. Durante los incidentes, también murieron dos policías en un accidente de helicóptero cuando acudían a sofocar las protestas.