Elecciones en Alemania
Los conservadores de Merz vencen en las elecciones alemanas con los ultras de AfD como segunda fuerza
El contexto La CDU de Merz lidera los sondeos a pie de urna con el 28,52% de los votos, mientras que la ultraderechista AfD se sitúa como segunda fuerza con un 20,8%.

Friedrich Merz apunta a ser el próximo canciller en Alemania. El líder del bloque conservador formado por la Unión Cristianodemócata (CDU) y su hermanada Unión Socialcristiana (CSU) bávara lideraba los sondeos a pie de urna de las elecciones de este domingo con un 28,5% de los votos. Horas después los resultados oficiales confirman su victoria con un 28,52% de los votos. Se trata de las elecciones con más participación desde la reunificación en 1990 con un 83%.
"A nuestros electores, muchas gracias por la confianza que han depositado en nosotros. A mí personalmente. Es una responsabilidad, y soy consciente del trabajo que tenemos. Lo voy a asumir con gran respeto. Sé que no va a ser fácil. Quiero expresar una palabra de respeto a nuestros competidores políticos", ha aseverado Merz tras los resultados.
El ganador de las elecciones ha señalado que se dedicará "rápido" a hablar con el resto de fuerzas y espera no tener unas "largas negociaciones": "La contienda electoral ha sido necesaria en los grandes puntos que afectan a nuestro país, pero ahora tenemos que hablar. Tenemos que hacerlo rápido para tener un Gobierno cuanto antes. Con una mayoría parlamentaria, porque el mundo no nos espera y no espera que tengamos unas largas negociaciones".
Como segunda fuerza quedaría la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) de Alice Weidel, pero con poca utilidad dado el cordón sanitario establecido por el resto de partidos políticos para el 20,8% de los votos. Pese a que esperaban estar entorno al 25%, Weidel habla de un "éxito histórico" para su partido destacando haber doblado su tamaño en el parlamento y haberse convertido en la segunda fuerza en Alemania, aunque su posición solo le valdrá para ser la primera fuerza de la oposición.
De hecho, Weidel ya se ha ofrecido a formar gobierno con Merz, ya que las cuentas le darían a ambos partidos sin necesidad de ninguno más: "Nuestra mano estará siempre extendida para la participación en el gobierno". Eso sí, se ha ofrecido cargando contra la CDU señalando que no tendrán que hacer ninguna concesión para pactar porque la formación de Merz "ha copiado casi el 100% de nuestro programa".
No obstante, Merz ha descartado esa opción en el debate habitual en Alemania tras los resultados electorales: "Tenemos visiones divergentes en política exterior, de seguridad, con respecto a la OTAN. Nos pueden tender la mano todo lo que quieran, pero no caeremos en una política errónea". "No voy a cuestionar el legado de 75 años de Unión Democristiana solo por una autodenominada Alternativa para Alemania. Ustedes quieren lo contrario de lo que queremos nosotros", remachó.
La gran caída, que ya se estaba pronosticando, es la del actual canciller, Olaf Scholz, y los socialdemócratas (SPD), que caerían a ser la tercera fuerza política en el Bundestag, el parlamento alemán, con un 16,41% de los votos según los resultados provisionales. La derrota ya está asumida para su secretario general, Matthias Miersch, que ha reconocido que el mandato de gobernar recae ahora Friedrich Merz. "Es una derrota histórica para el SPD. Es una noche muy amarga", ha lamentado Miersch.
Una línea parecida a la que ha seguido Scholz, que ha asumido la derrota: "El resultado ahora es malo y asumiré la responsabilidad. Para mí es importante felicitar y dar la enhorabuena al señor Merz y a la CDU porque va a conformar el próximo Gobierno". Pero, a pesar del golpe, el líder de SPD ha recalcado a Merz los pactos para no llegar a acuerdos con la ultraderecha: "Tenemos que mantener lo que hemos dicho. No se puede cooperar con la ultraderecha. Mantenemos nuestra palabra y esperamos que el resto de partidos mantengan esta promesa".
Por su parte, los Verdes ocuparían el cuarto puesto con el 11,61% y solo Linke (La Izquierda) entraría como partido menor con el 8,77% de los votos en una subida inesperada hasta para su propio candidato, Jan van Aken, que ha celebrado con euforia la subida de su partido que le deja como quinta fuerza política cuando dudaban si lograrían entrar en el Bundestag.
En la cuerda floja sí que se quedan FDP y BSW, que no obtienen representación en el parlamento al no superar ninguno el umbral del 5%. Algo que afectará a los cálculos de Merz para ser canciller. Con los liberales de FDP fuera, ahora a la CDU le bastaría con pactar con el SPD de Scholz para ser el nuevo canciller en Alemania.