Corea del Norte ha extendido su amenaza nuclear hasta Japón y Corea del Sur, a los que recrimina su apoyo "ardiente" a Estados Unidos en la búsqueda de nueva sanciones, y a los que aboga por "liquidar" en deseo de su ejército y su pueblo.
El régimen norcoreano cree necesario "asestar un golpe" sobre los japoneses, que "no han entrado en razón" ni después de que lanzara un misil balístico intercontinental sobre el archipiélago, cuyas islas "deberían ser hundidas en el mar por la bomba nuclear Juché", dijo un portavoz del Comité norcoreano para la Paz de Asia-Pacífico en un comunicado recogido por la agencia KCNA.
El comité norcoreano cargó también contra el Gobierno surcoreano, al que acusa de ser un grupo de "traidores" y "perros de Estados Unidos" al pedir sanciones más duras sobre sus "compatriotas". "El grupo de traidores pro-estadounidenses deben ser severamente castigados y liquidados con un ataque de fuego para que no puedan sobrevivir.
Sólo entonces, la nación coreana podrá prosperar en un territorio unificado", expuso el régimen. Pyongyang mostró así su rechazo al apoyo dado por los países vecinos a las nuevas sanciones impuestas el lunes por el Consejo de Seguridad de la ONU, con el que también dijo sentirse "furioso".
El régimen liderado por Kim Jong-un acusó al organismo de haberse convertido en "una herramienta del mal" que sirve a EE.UU., y que en lugar de asegurar la paz y la seguridad, "la destruye sin piedad". "El Consejo de Seguridad de la ONU se compone de países sin principios y, en consecuencia, tal herramienta inútil debe ser disuelta de inmediato", recoge el comunicado de KCNA.
La ONU aprobó nuevas medidas sancionadoras contra Corea del Norte destinadas a ahogar más su economía, en respuesta a su sexto y más potente ensayo nuclear, ejecutado el 3 de septiembre. Según las últimas estimaciones, la explosión pudo alcanzar los 250 kilotones, el doble de lo inicialmente estimado, informó la web estadounidense 38 North, en base a la revisión al alza de la magnitud del terremoto que generó, hecha por la Organización del Tratado de Prohibición Total de Pruebas Nucleares. Esta potencia sería casi 17 veces superior a la de la bomba atómica estadounidense "Little Boy" que destruyó la ciudad japonesa de Hiroshima en agosto de 1945 y se encuentra muy por encima de los 160 kilotones estimados por el Gobierno japonés.