El Ministerio de Defensa de Corea del Sur ha denunciado en la madrugada de este domingo que Corea del Norte ha disparado un misil balístico no especificado hacia el mar de Japón, conocido en Corea como mar del Este.
Una fuente militar consultada por la agencia de noticias surcoreana Yonhap ha afirmado que el misil ha sido disparado desde un área interior.
El Ministerio de Defensa de Japón ha explicado que se estima que el misil habría caído fuera de la Zona Económica Exclusiva de Japón. La distancia del vuelo habría sido de 400 kilómetros y la altura máxima de 50 kilómetros, según ha recogido la cadena NHK.
Este ejercicio por parte del Ejército norcoreano --el quinto desde que la Administración Yoon Suk Yeol asumiese el cargo en mayo de este año-- se ha producido dos días después de que un portaaviones estadounidense de propulsión nuclear llegara a la ciudad portuaria de Busán, en el sureste del país, para realizar sus primeros simulacros combinados con las tropas surcoreanas en cinco años.
Además, la vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris, visitará Japón y Corea del Sur esta semana. Harris llega este domingo y su viaje termina el 29 de septiembre, tras encabezar una delegación estadounidense en el funeral de estado del ex primer ministro nipón Shinzo Abe, asesinado el 8 de julio.
Tanto en Tokio como en Seúl, la vicepresidenta se reunirá con altos funcionarios gubernamentales y representantes de la sociedad civil.
Corea del Sur ha registrado el lanzamiento después de avisar este sábado de que había detectado actividades en Corea del Norte que sugerirían que podría estar preparándose para disparar un misil balístico desde un submarino frente a su costa.
"Estamos monitoreando de cerca las instalaciones y actividades (...) de Corea del Norte y manteniendo una postura de preparación completa", ha afirmado un militar en declaraciones recogidas por la citada agencia. El Ejército habría detectado signos de preparación para dicha prueba militar en la ciudad costera de Sinpo, en el norte del país.
El Ministerio de Defensa de Estados Unidos ha afirmado que el lanzamiento del misil de Pyongyang al mar de Japón no ha supuesto una amenaza para el personal estadounidense o sus aliados, aunque supone un "impacto desestabilizador".
"Si bien hemos evaluado que este evento no representa una amenaza inmediata para el personal o el territorio de EEUU, o para nuestros aliados, el lanzamiento del misil destaca el impacto desestabilizador de los programas ilegales de armas de destrucción masiva y misiles balísticos de la RPDC (República Popular Democrática de Corea)", reza el comunicado publicado por el Comando del Indo-Pacífico de Estados Unidos.
Así, el Pentágono ha reiterado que "los compromisos de Estados Unidos con la defensa de la República de Corea y Japón siguen siendo férreos".