El brote de coronavirus que ha causado la muerte en China de, al menos, 25 personas ha provocado el cierre de cuatro nuevas ciudades cercanas a Wuhan, epicentro del brote de coronavirus, que ya fue cerrada este miércoles. En total, han quedado aislados más de 21 millones de personas.
Ya hay 830 personas afectadas por este virus y, ante esta alerta, las autoridades de Huanggang y de Ezhou han suspendido el transporte público y han pedido a la población que no salga de sendos municipios sin "razones especiales". Además, en las últimas horas, también se ha cerrado la Ciudad Prohibido de Pekin. La preocupación entre las autoridades y los ciudadanos es máxima.
Huanggang tiene más de seis millones de habitantes y allí han anunciado que a partir de este viernes se procederá a cerrar todas las instalaciones del transporte público .
Mientras que en Ezhou, con un millón de residentes, han suspendido todo tipo de desplazamientos para intentar evitar que el brote se siga propagando por el país. Otras dos localidades de menor tamaño, Chibi y Zhijiang, también han restringido los movimientos de sus vecinos.
Wuhan ha sido cerrada a cal y canto
Este miércoles, las autoridades de Wuhan también procedieron a cerrar la ciudad, prácticamente, a cal y canto. Nadie puede entrar ni salir de la urbe si no se trata de un caso de extrema necesidad y se han suspendido todos los servicios de transporte público.
La Policía, incluso, ha llegado a cortar las entradas al aeropuerto y a las estacines de tren, así como las carreteras para evitar la salida de los ciudadanos en vehículos privados. Además, las autoridades han decretado el uso obligatorio de mascarillas para todos los viandantes y los supermercados han agotado, prácticamente, sus existencias ante el miedo de los residentes.
Mientras, en Pekín el Gobierno ha prohibido todas las celebraciones masivas del Año Nuevo Chino, que se celebra el próximo sábado, 25 de enero, y provoca grandes movilizaciones a nivel nacional e internacional.
El perfil de los afectados
Varón, mayor de 60 años, con fiebre y con unos 12 días de hospitalizaciónde media. Estas han sido, hasta el momento, las características más habituales entre las víctimas mortales. Las autoridades sanitarias del país asiático han publicado información detallada sobre los fallecidos: 13 varones y cuatro mujeres de entre 48 y 89 años.
Son casos como el del señor Zhan, de 84 años, quizá el más paradigmático: fue hospitalizado el pasado 9 de enero en el Hospital Número 5 de Wuhan con fiebre, tos y dificultades para respirar, tres de los cuatro síntomas más comunes para sospechar de un contagio (el cuarto es la fatiga).
A las 10:16 hora local (02:16 GMT) de este miércoles, el paciente dejó de respirar y el ritmo cardíaco se fue reduciendo de manera paulatina. A las 10:52 hora local se certificó su muerte.
Por su parte, el señor Zheng, de 61 años, comenzó a presentar fiebre el día 20 de diciembre, además de tos y fatiga, pero no fue hospitalizado hasta el día 27 en el Hospital Puren de Wuhan.
Al día siguiente fue entubado y, el día 30 de diciembre, derivado a la UCI del Hospital de JinYinTan para recibir oxigenación por membrana extracorpórea y tratamiento especializado adicional. A las 20:47 del 9 de enero, el ritmo cardíaco quedó en cero y de nada sirvieron los intentos del personal sanitario para reanimarlo.
La fiebre, el síntoma más común
La fiebre fue el síntoma más común entre los 25 fallecidos como consecuencia del coronavirus. Por otro lado, la hipertensión es uno de los antecedentes médicos que más se repite en el historial de los fallecidos, especificado en el caso de siete de ellos. La diabetes y los problemas cardiovasculares también son denominador común de varios de ellos.
Tan solo dos de las víctimas (una mujer de 48 años y un hombre de 53) están por debajo de la barrera de los 60 años, mientras que seis de las víctimas están en la horquilla de los 61 a los 70 años, dos en la comprendida entre los 71 y los 80 años, y siete en aquella entre los 81 y los 90 años.