Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE) no han adoptado este lunes medidas adicionales para paliar el golpe económico del brote de coronavirus, aunque han cifrado el impacto de las acciones fiscales ya adoptadas en el 1% del PIB y se comprometieron a tomar más si fuera necesario.
Así, los socios comunitarios no han aprobado el plan de 400.000 millones de euros que pedían España, Italia y Francia y han apuntado que tomarán "cualquier acción política coordinada y decisiva que sea necesaria, incluyendo medidas fiscales, para apoyar el crecimiento y el empleo".
La declaración aprobada por el Eurogrupo tras una reunión por videoconferencia, en la que han revisado a las medidas ya anunciadas a nivel nacional y comunitario, señala que las medidas fiscales adoptadas hasta ahora por los Veintisiete representan de media el 1% del PIB para apoyar a la economía en 2020, al tiempo que se ha aprobado proporcionar liquidez por al menos el 10% del PIB, a través de esquemas de avales públicos y aplazamiento del pago de impuestos.
Reuniones semanales
El Eurogrupo, presidido por Mario Centeno, ha acordado mantener contactos telemáticos de forma semanal de ahora en adelante para seguir la situación.
"Este es el primer paso y el Eurogrupo continuará siguiendo la situación de cerca y seguirá listo para actuar rápidamente", ha destacado el presidente del foro, Mário Centeno, en una rueda de prensa también telemática tras la reunión.
El encuentro se ha saldado con una puesta en común de las acciones nacionales y comunitarias que se han tomado hasta ahora, aunque tanto la Comisión Europea como el Banco Central Europeo habían llamado a los Gobiernos a dar una ambiciosa respuesta fiscal coordinada.
"Se ha dado un buen paso fijando el tono adecuado para una respuesta política coordinada"
Preguntado sobre si los países han mostrado la suficiente ambición, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, ha indicado que "se ha dado un buen paso fijando el tono adecuado para una respuesta política coordinada", si bien ha recalcado que "la situación evoluciona día a día", por lo que "por supuesto reforzaremos nuestras medidas".
Medidas nacionales
La declaración señala que las autoridades nacionales harán uso de sus estabilizadores automáticos e implementarán medidas temporales como el aumento del gasto para contener y tratar la enfermedad, proporcionar liquidez a las empresas en los sectores más perjudicados, en particular las pymes, y dar apoyo a los trabajadores afectados.
A las medidas que adopta cada país en función de sus circunstancias, se unen las aprobadas a nivel comunitario. En este sentido, el Eurogrupo valoró la iniciativa de la Comisión para movilizar 37.000 millones de euros en inversiones, así como otros 28.000 millones de euros con cargo a los fondos estructurales para paliar la epidemia.
También que el Banco Europeo de Inversiones vaya a movilizar 8.000 millones de euros en financiación para las empresas.
Asimismo, destacaron que usarán la flexibilidad que contemplan las normas fiscales europeas para poder adoptar "las medidas de largo alcance" necesarias. Además alabaron las decisiones adoptadas por el BCE y la Autoridad Bancaria Europea para dar liquidez y flexibilidad a la banca, que deberá desempeñar "un papel clave" para evitar una crisis mayor.
Por último, encargaron a la Comisión y el Mecanismo Europeo de Estabilidad, el fondo de rescate europeo, que estudien cómo podía participar esta institución, cuya capacidad de préstamo asciende a 410.000 millones de euros, en la respuesta a la crisis.