Nueva York se ha convertido en la 'zona cero' de la pandemia del coronavirus que está asolando a todo el planeta. La ciudad estadounidense muestra una imagen desgarradora, la de una enorme zanja cavada por presos en la isla de Hart donde se están enterrando a decenas de personas que han fallecido a causa del COVID-19. Allí se están trasladando a las víctimas, que son sepultadas en cajas de madera dispuestas en fila que luego tapian con cemento.
En esta fosa común acaban aquellos cuerpos que nadie reclama o de las familias sin recursos. Se estima que en este punto se está enterrando a una media de 25 personas cada semana. La razón es la situación de descontrol y desbordamiento que está sufriendo por culpa de la epidemia Estados Unidos, que se ha convertido en el primer país en número de contagios (cerca de 500.000).
Las morgues de todo EEUU están saturadas, y en muchas zonas casi se están improvisando medidas sobre la marcha. En el estado de Illinois, por ejemplo, se ha construido a marchas forzadas un depósito temporal mientras la cifra de fallecidos sigue disparándose. Porque, con casi 17.000 decesos, Estados Unidos también ha superado a España en número de muertes. Solo el estado de Nueva York concentra más de 7.000 fallecidos y 160.000 contagios. Esto es, cerca de 8.000 positivos más que todo nuestro país.
Las cárceles se han convertido también en auténticas ollas a presión. En una prisión de Washington un grupo de presos ha llegado a amotinarse ante el creciente número de contagios. Aun así, la Casa Blanca ha afirmado que el número de hospitalizaciones por el coronavirus ha disminuido. En esta línea, Donald Trump, presidente de Estados Unidos, se ha atrevido a asegurar que han llegado ya al famoso pico de la curva.
Casi 17 millones de estadounidenses han perdido su empleo
"Estoy bastante seguro de que estamos en la cima de la montaña y vamos hacia abajo", ha declarado el mandatario norteamericano en rueda prensa. Además, algunos de los asesores de Trump ya están planteando reabrir determinados sectores económicos a principios del mes de mayo. Ahora mismo, con las medidas impuestas por esta crisis sanitaria, hay 42 estados donde se han paralizado las actividades no esenciales, hecho que ha provocado que casi 17 millones de estadounidenses han perdido su empleo.
"(Las familias trabajadoras) están a un par de semanas de no poder pagar las facturas", ha asegurado una maquilladora desempleada en Carolina del Norte. La tasa de desempleo en abril podría alcanzar el 15%, una cifra que no se ve desde el final de la Gran Depresión. Con todo, Donald Trump cree que saldrán de esta situación de emergencia incluso más fuertes: "Registraremos un gran rebote". En contraposición, la nota positiva es el número de recuperados en Estados Unidos: casi 26.000 ya han recibido el alta.