Las protestas contra el plan de Japón aprobado por el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) para verter agua tratada de la central nuclear de Fukushima van a más, con la principal formación opositora de Corea del Sur, el Partido Democrático, reuniéndose con Rafael Mariano Grossi, director de la OIEA, Rafael Mariano Grossi, para transmitirle sus recelos hacia dicho plan.
Y es que la oposición surcoreana ha reaccionado con especial virulencia al vertido, comenzando por el líder parlamentario de la formación, Woo Won Shik, quien ha llegado incluso a entrar en una huelga de hambre como protesta al denunciar que "la verificación del OIEA ha sido completamente partidista a favor de Japón", y que el organismo "ha perdido toda su neutralidad y su objetividad".
"Me parece lamentable que el OIEA haya alcanzado sus conclusiones sin investigar a fondo el impacto del vertido en las aguas de los países vecinos y se haya plegado a una investigación confeccionada a gusto de Japón", ha añadido en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias surcoreana, Yonhap.
Cerca de 1,33 millones de toneladas de agua tratada se encuentran almacenadas en las instalaciones, que están casi al tope de su capacidad, según datos de la compañía que gestiona la central japonesa.
Desde que tuvo lugar el terremoto y posterior tsunami en marzo de 2011 que provocó la fusión de tres núcleos al eliminar los sistemas de refrigeración de emergencia y generó grandes cantidades de agua radiactiva se han ido acumulando en la planta de Fukushima, donde ha sido mezclada con agua de lluvia y de torrentes subterráneos.
De hecho, incluso Corea del Norte se ha sumado a las críticas de la oposición surcoreana para impedir el vertido, que llegó a describir como un acto de agresión por parte del Gobierno japonés, en un nuevo enfrentamiento entre ambos países después de las constantes denuncias de Tokio a los ensayos con misiles norcoreanos que acaban en el mar.
"La justa comunidad internacional no debe sentarse a observar la acción malvada, antihumanitaria y beligerante de la fuerza corrupta que intenta perturbar el hogar de la humanidad del planeta azul, y debe unirse para detenerlos y destruirlos por completo", según una declaración atribuida al director de asuntos exteriores del Departamento de Protección de la Tierra y el Medio Ambiente y recogida por la cadena CNN.
Este lunes, un grupo de diputados del Partido Democrático ha partido a Japón para protestar por el plan de Japón. "Trataremos de evitar con todas nuestras fuerzas que se vierta el agua contaminada de la planta de Fukushima a través de la cooperación internacional", afirman. La visita a la capital nipona, de tres días de duración, incluye celebrar protestas frente a la Dieta (parlamento) y la residencia del primer ministro, Fumio Kishida, además de una visita a la oficina del OIEA en Japón para mostrar su rechazo al informe del organismo.