Un equipo de rescate chileno ha encontrado un "posible" signo de vida bajo los escombros de un edificio colapsado en un barrio en el centro de Beirut, un mes después de la explosión.
Francisco Lermanda, jefe del equipo de rescatistas, aseguró que el perro del equipo se ha sentado en dos ocasiones diferentes "en el mismo punto" donde piensan que hay dos cuerpos. Mientras que uno creen que está sin vida, el otro, que se encontraría justo debajo del cadáver, da señales de vida con 18 pulsaciones por minuto, pero sin poder confirmar si se tratan de latidos de corazón, afirmó en la escena de rescate Edouard Bitar, miembro de la ONG Live Love Lebanon.
El jefe del equipo explicó que no se puede introducir maquinaria en caso de que haya una posibilidad de una persona con vida. "No podemos meter máquinas, no podemos golpear ni hacer nada que pueda arriesgar la vida de esa persona", sentenció. Añadio que, en caso de que hubiera un cuerpo con vida, sería el de un bebé "por la forma" en la que se encuentra y apuntó que no saben cuánto puede durar la operación, pero aclaró que no se van a ir hasta que descarten o confirmen que haya alguien dentro.
Durante la operación de rescate, el equipo chileno pidió silencio y apagar los móviles a los periodistas que se encontraban en el lugar para no interferir en los sonidos que podrían detectar, según constató la Agencia EFE.
Desde que sucedió la explosión, que dejó 190 muertos y más de 6.500 heridos, los escombros de este edificio no han sido removidos. Según las autoridades, solo hay tres personas desaparecidas contabilizadas por la explosión.