Una vicepresidenta del Parlamento Europeo, la socialdemócrata griega Eva Kaili, se encuentra entre los siete detenidos en Bélgica a raíz de una investigación por un posible caso de corrupción ligado a intentos de Qatar, país que acoge el Mundial de fútbol, de influenciar la posición parlamentaria.
Kaili, que ocupa una de las 14 vicepresidencias de la Eurocámara, fue detenida el viernes y su vivienda fue registrada por la policía judicial. En total se efectuaron 16 registros domiciliarios y el arresto de cuatro personas, incluido el compañero de Kaili, que es un actual colaborador vinculado al grupo de los Socialistas y Socialdemócratas en la Eurocámara, según los diarios 'Le Soir' y 'Knack' y recoge EFE.
Los rotativos avanzaron la existencia de una investigación por un supuesto caso de corrupción, organización criminal y blanqueo de capitales iniciada por la Fiscalía federal belga el pasado julio ante las sospechas de que Qatar habría tratado de influenciar la posición del Parlamento. "Durante varios meses los investigadores de la policía judicial han sospechado que un Estado del Golfo ha intentado influir en las decisiones económicas y políticas del Parlamento Europeo", indicó la Fiscalía federal en un comunicado distribuido a la prensa.
Lo habrían hecho "pagando sustanciales cantidades de dinero y ofreciendo importantes regalos a terceros con una posición política o estratégica importante en el seno del Parlamento Europeo", añadió. Aunque esta institución no menciona explícitamente a Qatar, los dos medios belgas aseguran que varias fuentes bien informadas les han confirmado que es en este país en el que se centra la investigación dirigida por un juez especializado en delitos financieros.
Aunque la Fiscalía no ha facilitado los datos de los detenidos, 'Le Soir' y 'Knack' aseguran que se trata del ex eurodiputado italiano del grupo de los Socialistas y Demócratas Pier Antonio Panzeri, así como el recién elegido presidente de la Confederación Internacional de Sindicatos, Luca Visentini, y del compañero de la vicepresidenta de la Eurocámara detenida y de un lobista cuyas identidades no se han facilitado. Todos ellos, a quienes se les aplica la presunción de inocencia, deben declarar ante el juez encargado del caso, Michel Claise.
También habrían sido detenidos la mujer e hija de Panzeri y el padre de Kaili, a quien la Policía habría sorprendido cuando se disponía a huir con bolsas llenas de dinero.
Según las informaciones periodísticas, medio millón de euros en efectivo se habrían localizado en casa de Panzeri, quien ahora es presidente de la asociación Fight Impunity, dedicada a luchar contra la impunidad por violaciones graves de los derechos humanos o crímenes contra la humanidad.
Escándalo en el Parlamento Europeo
Preguntado al respecto de la investigación, un portavoz del Parlamento Europeo dijo a EFE que la institución "no hace comentarios sobre procedimientos judiciales" y que, "como siempre, coopera plenamente con las autoridades nacionales al cargo" de los mismos. Por su parte, el grupo de los Socialistas y Demócratas en la Eurocámara dijo en un comunicado estar "consternado por las acusaciones de corrupción en las instituciones europeas", un delito ante el que aseguró tener "tolerancia cero", se mostró dispuesto a cooperar "plenamente" con las autoridades judiciales y apoyó una investigación "exhaustiva y una divulgación completa".
"Dada la gravedad de las acusaciones, hasta que las autoridades competentes proporcionen información y aclaraciones relevantes, solicitamos la suspensión del trabajo sobre cualquier expediente y votación plenaria relacionada con los Estados del Golfo, en particular la liberalización de visados y las visitas planificadas", concluyó el grupo en la nota.
Este sábado, la presidenta de la cámara, Roberta Metsola, ha asegurado a través de Twitter que el Parlamento Europeo "se mantiene firme contra la corrupción" y ha garantizado su cooperación con las autoridades policiales y judiciales: "Haremos todo lo posible para ayudar al curso de la Justicia", ha asegurado.