El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha descartado la posibilidad de un confinamiento nacional a causa de la pandemia de coronavirus, después de que los estados de Nueva York y California hayan ordenado a los ciudadanos permanecer en sus domicilios para frenar la propagación del COVID-19.
"No lo creo", ha aseverado Trump preguntado por la posibilidad de ordenar a los ciudadanos de todo el país norteamericano que permanezcan en sus casas, según ha recogido la cadena de televisión 'CNN'.
En este sentido, Trump ha considerado que este tipo de medidas pueden ser necesarias en zonas críticas del país, como Nueva York y California, pero que otras áreas no presentan los mismos "problemas". "No tienen los mismos problemas. No tienen, de ninguna manera, los mismos problemas", ha zanjado.
No obstante, el mandatario sí ha elogiado a los gobernadores de Nueva York y California, Andrew Cuomo y Gavin Newsom, respectivamente, por los pasos que han dado para intentar mitigar la expansión del COVID-19 en sus territorios.
En concreto, Cuomo anunció que todos los trabajadores de negocios no esenciales en todo el estado deberán quedarse en casa a partir de la medianoche de este domingo, mientras que Newsom ordenó a todos los ciudadanos de California, unos 40 millones, que no salieran de sus hogares. "Les aplaudo. Están dando pasos muy fuertes y audaces y les aplaudo", ha asegurado Trump.
La suma de población entre ambos Estados es de 59 millones de personas, lo que significa que las medidas llevadas a cabo afectan casi a uno de cada cinco estadounidenses. En este sentido, Cuomo ha reconocido que causarán "interrupciones". "Causarán el cierre de negocios. Causarán que los empleados se queden en casa. Causarán mucha infelicidad", lamentó el gobernador del estado neoyorquino, que ha asegurado que acepta "toda la responsabilidad".
La pandemia del nuevo coronavirus ha dejado hasta el momento más de 19.300 contagiados en el país norteamericano y más de 200 muertos. A nivel global, el COVID-19 ha dejado más de 11.300 muertos.