Tradicional desfile militar en los Campos Elíseos de París para celebrar el Día Nacional de Francia. El país invitado este año ha sido Estados Unidos; por supuesto, con Donald Trump en la tribuna. Emmanuel Macron lo ha saludado con un largo apretón de manos.
Durante las más de dos horas que ha durado el desfile, los dos líderes han compartido risas, y de los labios de Trump se han podido leer palabras como "fantástico" y "buen trabajo"; felicitaciones al presidente francés, que parece ser el único líder europeo con el mantiene buena sintonía. "Nada nos separará jamás", ha destacado el dirigente europeo en su discurso ante la satisfacción del líder estadounidense.
No en vano, Trump ya había abierto en el país galo la puerta a que Estados Unidos se incorpore de nuevo al acuerdo del clima de París. "Cualquier cosa podría ocurrir respecto al Acuerdo de París. Veremos qué pasa", señaló el presidente de EEUU junto a su homólogo francés. Pero en esta visita de dos días a Francia, Trump no podía pasar sin dejar alguna de sus perlas, como la dedicada a la mujer de Macron, Brigitte: "Estás en muy buena forma. Preciosa".
Comentario a la primera dama que para muchos ha sido de dudoso gusto. Donald y Melania ya están rumbo a Estados Unidos. Quizá por ser un territorio más cómodo para él, el mandatario norteamericano ha dado nuevas novedades sobre el muro que quiere construir en la frontera entre su país y México. Ahora, Trump afirma que su construcción estrella será transparente y solo cubrirá 1.400 kilómetros de los más de 3.200 que tiene la frontera con el país vecino.