El número de víctimas mortales en Filipinas por el tifón Mangkhut asciende a 59 y se contabilizan decenas de desaparecidos, según los últimos datos provisionales recabados a medida que los equipos de emergencia acceden a las áreas azotadas por este fenómeno meteorológico.
El asesor presidencial Francis Tolentino, designado por el mandatario Rodrigo Duterte para supervisar la respuesta al desastre en las áreas afectadas, confirmó esas cifras a la prensa local en Cagayan, provincia por la que entró el mayor tifón de la temporada el sábado por la mañana al país. La mayoría de estas muertes se produjeron a causa de deslizamientos de tierra en las zonas montañosas que recibieron las lluvias torrenciales y fuertes vientos que arrastró Mangkhut a su paso ayer por el norte de Filipinas.
Veinte de esas muertes se produjeron en la región de Cordillera, cuatro en Nueva Ecija y una en Ilocos, según el recuento del Gobierno nacional. En la región de Cordillera una familia de seis miembros murió cuando su casa, en la ciudad de Baguio, quedó sepultada por un desprendimiento de tierra y un residente del área de Kalinga falleció aplastado por una roca.
En Nueva Vizcaya, un hombre de 36 años y tres de sus hijos -entre ellos uno de dos años y otro de ocho meses- fallecieron también porque un corrimiento de tierras arrasó su casa, mientras que el resto de su familia estaba refugiada en un centro de evacuación.
En la provincia de Ilocos Sur, un hombre murió al caerle encima un árbol mientras limpiaba de escombros el acceso a su casa. Según Tolentino, por el momento no se tiene información de víctimas en las provincias de Cagayan e Isabela, en la costa nororiental de la isla de Luzón, por donde entró Mangkhut y que fueron las primeras en recibir el embate del tifón.
Un equipo de tres personas de la televisión nacional TV5 permanece desaparecido tras ser vistos por última vez en Santa Ana, en la provincia de Cagayan. El asesor presidencial subrayó que además de localizar a los desaparecidos, los esfuerzos se están centrando en restablecer la electricidad y las comunicaciones en las zonas afectadas.
Está previsto que el presidente Rodrigo Duterte visite las zonas afectadas y realice una "inspección área" para evaluar los daños. Tras tocar tierra en la localidad de Baggao, en la costa nororiental del país, Mangkhut arrastraba vientos de hasta 305 kilómetros por hora, lluvias torrenciales y provocó olas de hasta seis metros.