El presidente ultraconservador Ebrahim Raisi ha muerto en un accidente de helicóptero tras una presidencia y una carrera judicial marcada por la ortodoxia ultraconservadoraque provocó las protestas feministas de "vida, mujer, libertad" y la intensificación de la represión en la República Islámica.
Los equipos de rescate localizaron este lunes el helicóptero en el que viajaba Raisi y sus acompañantes, tras horas de una amplia búsqueda en las montañas de la zona de Varzeqan, en la provincia de Azerbaiyán Oriental, donde desapareció un día antes.
Un presidente iraní que era conocido como 'el juez de la horca'. Un apodo que se ganó mucho antes de ser líder político, sino que lo hizo por pertenecer al Comité de la Muerte. Con tan solo 28 años y en su labor de fiscal, ordenó miles de ejecuciones en los años 80 a los opositores políticos que ya le empezaron a marcar su figura en la política iraní.
Raisi, que un fiel servidor de los ayatolás, se presentó por primera vez a a las elecciones en 2017, consiguiendo un 38% de los votos, insuficientes para vencer a su rival, Hasan Rohaní, que repitió legislatura.
Sin embargo, no iba a permitir una segunda derrota. En 2021, sí logró asumir la presidencia, pero en unas elecciones en las que no había ni candidatos ni participación. Ebrahim Raisi venció en esas elecciones con la menor participación en la historia de la República Islámica, además de haberse beneficiado de vetos que sufrieron otros candidatos presidenciales.
Y, pese a su expediente manchado de sangre, Raisi estaba muy bien considerado para suceder a Ali Jamenei, líder supremo de Irán. Un puesto que finalmente no podrá ocupar.
Conocido por la represión del velo que acabó con la muerte de Mahsa Amini
Su victoria en 2021 llevó, pese a parecer más progresista durante la campaña, a una mayor represión en Irán que llevó a su Gobierno a intensificar las políticas de uso del obligatorio velo islámico, que se había relajado en los últimos años, y que desembocó en la muerte de Mahsa Amini en septiembre de 2022 tras ser detenida por no llevar bien puesto el hiyab.
La muerte de la joven de 22 años desató las mayores protestas en años contra la República Islámica y solo desaparecieron tras una represión policial en la que murieron 500 personas y en las que fueron ahorcadas ocho personas, una de ellas en público.
También bajo su mandato se produjo el primer ataque directo de Irán contra Israel, cuando el 13 de abril el país persa lanzó cientos de misiles y drones contra su adversario regional, en un espectacular ataque que sin embargo no provocó daños. Ese ataque fue una respuesta a la muerte de siete miembros de la Guardia Revolucionaria en el consulado iraní de Damasco, y del que Teherán acusó a Tel Aviv.
Hosein Amir Abdolahian, el ministro también fallecido
Junto a Raisi volaban en la aeronave el ministro iraní de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, el gobernador de Azerbaiyán Oriental, Malik Rahmati, y el líder de los rezos de los viernes de la ciudad de Tabriz, Mohammad-Ali Al-Hashem, además de un número indeterminado de miembros de la tripulación.
Especial mención merece Abdolahian, que era una de las caras visibles en el ámbito internacional y principal toma de contacto para el resto de países. El ministro de Exteriores era conocido porque tenía estrechos lazos con la Guardia Revolucionaria y era uno de los líderes y portavoces del Eje de la Resistencia, el grupo paramilitar antiisralí y antiestadounidense. al que pertenecen por ejemplo Hezbolá y los rebeldes hutíes de Yemen.