Única coincidencia, la paz

EEUU y Ucrania, todo diferencias en el primer cara a cara en Múnich para acercar el fin de la guerra

Y mientras tanto... Los ucranianos de a pie no dejan de observar sus móviles en busca de noticias de lo que será su futuro y el de su país tras tres años de conflicto y sangre.

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y el vicepresidente de Estados Unidos (EEUU), JD Vance, en el primer encuentro para la paz en Múnich.

Una larga mesa cubierta con un mantel blanco. Al fondo, banderas de Estados Unidos y de Ucrania intercaladas. A los lados, una delegación ucraniana y otra estadounidense, lideradas, respectivamente, por el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, y el segundo de Donald Trump, JD Vance. Se disponen a abordar el fin de la invasión rusa a punto de cumplir tres años. Esta es la imagen del día en el mundo. Un cara a cara en el que las diferencias de ambos bandos son palpables. Según los mensajes que han ido lanzando solo coinciden en sus pretensiones de paz.

Este encuentro, celebrado en el marco de la Conferencia de Seguridad de Múnich, es el primero desde que este miércoles Trump llamase a su homólogo ruso, Vladimir Putin, y acordaran iniciar "de inmediato" las conversaciones de paz. Tras hora y media al teléfono, el norteamericano llamó a Zelenski. Un orden de conversaciones al que el ucraniano ha restado importancia, si bien las diferencias serán más difíciles de maquillar, como por ejemplo la referente a los minerales que Ucrania debería entregar a EEUU.

Un objetivo común, pero muchas diferencias

Es cierto que, en palabras de Vance, ambos desean "que la guerra llegue a su fin", así como que "cesen las matanzas" y "lograr una paz duradera", pero esta es "la primera reunión", ha dicho Zelenski. Asimismo, el ucraniano ha mostrado su esperanza en que "no sea la última", ya que lo que necesitan "es hablar más, trabajar más y preparar el plan para detener a Putin y finalizar la guerra". Precisamente, el oligarca ruso es el único ruso que quiere ver Zelenski: "Me reuniré con un solo ruso, con Putin", ha dicho antes de entrar.

Preguntado el vicepresidente estadounidense justo por esta cuestión delante de Zelenski, Vance se ha limitado a decir que es "importante" reunirse y empezar "a tener conversaciones", sin abordar el problema que podría suponer EEUU. Eso sí, el ucraniano ya ha advertido que solo se reunirá con el ruso una vez haya un plan común con EEUU y Europa para conseguir la paz.

Una paz a la que es necesario llegar, pero a ojos de Zelenski, con "garantías de seguridad" y más ahora ante la obviedad de que los americanos nunca ha querido a Ucrania en la OTAN. De hecho, sin ese paraguas de la alianza transatlántica Ucrania necesitará un ejército el doble de grande, en concreto, de un millón y medio de soldados.

Zelenski y Von der Leyen, entre ceder y no traicionar

Incluso, la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula Von der Leyen, ha admitido este viernes en Múnich que "Ucrania necesita la paz a través de la fuerza", además de que "un fracaso en Ucrania debilitaría a Europa, pero también a Estados Unidos (EEUU)". Es por ello, que aboga por agilizar la entrada de Ucrania en la Unión Europea (UE). En el otro extremo, el secretario general de OTAN, Mark Rutte, quien descarta la adhesión de Ucrania a la alianza, mientras pide "elaborar planes concretos" a Europa. Solo así, asegura, podrán tener su silla en la mesa de negociación.

Todo esto sucede en los despachos, pero sobre el terreno, los ciudadanos también observan con tensión lo que se avanza en ellos. Por un lado, los ucranianos ya han notado un cambio posición de su presidente Zelenski, sobre todo en las cosas que pide, puesto que si en los dos años anteriores de la guerra se veía que el Gobierno ucraniano insistía en recuperar el territorio perdido, ahora el foco está, principalmente, en conseguir garantías de seguridad para el futuro.

De esta manera, Zelenski debe equilibrar en el marco de su política interna los deseos de la población de acabar la guerra y conseguir condiciones, que no sean interpretadas como una traición a todos los soldados que han muerto en el frente durante estos años de invasión. Por eso, los ucranianos están las 24 horas del día pendientes del móvil intentando entender cual es exactamente el plan de paz que propone Trump, ya que de momento no hay ideas ni propuestas concretas.

El peligro continúa para los ucranianos

A pesar, de estos 'avances' -si así pueden considerarse- para la población ucraniana el peligro todavía es extremo. Sin ir más lejos este viernes se ha conocido la explosión de un dron ruso contra la central nuclear de Chernóbil, tal y como se puede ver en las imágenes sobre estas líneas. Ucrania acusa a Rusia del ataque, mientras que Moscú, por supuesto, lo niega. Si bien el aparato impactó en el sarcófago que protege uno de los reactores provocando un incendio, la Agencia de Energía Atómica asegura que no se han producido fugas radiactivas.

Además, durante la tarde de este viernes también se ha conocido que al menos dos personas han muertos en el sur de Ucrania al ser alcanzados en la explosión de un "artefacto desconocido". Rusia, también ha negado su participación aunque desde Kyiv denuncian que ya han detenido a varias personas por estar contratadas por los servicios secretos rusos para llevar a cabo atentados a pequeña escala. Todo, mientras la gente de a pie observa a aquellos en cuyas manos está en juego su futuro y el de su país.