El huracán Michael avanza a 20 kilómetros por hora y con vientos de hasta 230 kilómetros por hora, que aún pueden hacerse más fuertes, en dirección a la costa noroccidental de Florida, donde se espera que toque tierra en unas horas, según los meteorólogos.

Desde hace años no llega a la zona del 'Panhandle' de Florida un huracán como Michael, que ha ido fortaleciéndose desde que este martes se adentró en el Golfo de México y llegó a la categoría 4 de una escala de 5.

El Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami, advierte en su más reciente boletín de que el nivel del mar está "subiendo rápidamente" y de un posible nuevo fortalecimiento de este huracán "potencialmente catastrófico", antes de que toque tierra en algún punto del 'Panhandle' (el mango de la sartén), como se conoce esa zona de Florida.

Según el más reciente boletín del NHC, Michael se estaba moviendo hacia el norte y se encontraba a alrededor de 130 kilómetros al sursuroeste de Panama City, en Florida, y a alrededor de 135 kilómetros al oeste-suroeste de Apalachicola.

Las autoridades han dado órdenes de evacuar sus hogares o pedido que lo hagan voluntariamente a unas 375.000 personas de la zona amenazada, según recogen diversos medios locales.

En unas declaraciones a la cadena 'Fox News', Scott alerta a aquellos que no obedecieron la orden de evacuación obligatoria que ya es "demasiado tarde" para abandonar la zona y les instó a buscar refugio "inmediatamente". "No salga a la calle en medio de esto (...) No va a sobrevivir. Es mortal", dijo Scott.

El gran temor son las previsibles inundaciones provocadas por las lluvias, que pueden llegar hasta 30,4 centímetros en algunas zonas, y por una crecida del mar de hasta cuatro metros en determinados sitios.

Actualmente hay 54 refugios abiertos en la zona amenazada por el huracán y 2.5000 integrantes de la Guardia Nacional de Florida están activos y preparados para participar en operaciones de ayuda humanitaria, mantenimiento de la seguridad y búsqueda y rescate de personas.

Cuentan con más de 1.000 vehículos especiales para inundaciones, 13 helicópteros y 16 embarcaciones, de acuerdo con la gobernación.

La Guardia Costera, por su parte, ha retirado personal, embarcaciones y otros activos de las zonas que pueden ser impactadas por Michael para que no sufran daños y poder utilizarlos después del paso del ciclón para asistencia.