El Parlamento británico ha asestado un nuevo revés a la primera ministra, Theresa May, con la aprobación de la conocida como Enmienda Letwin, que permite al Parlamento asumir el timón sobre las decisiones relativas al Brexit. La enmienda ha salido adelante con el apoyo de tres secretarios de estado que han dimitido de sus cargos para votar en contra de May.
El Parlamento ha aprobado así la enmienda con 329 votos a favor y 302 en contra, un margen mucho mayor de lo que esperaban los analistas.
La iniciativa planteada por el diputado conservador sir Oliver Letwin por la que el Parlamento tendría el poder de confeccionar la agenda de votaciones y arrebataría así de forma efectiva el control del Brexit a May con el objetivo de lograr una nueva mayoría para superar el actual bloqueo tras el rechazo en dos ocasiones por los Comunes del Acuerdo de Retirada que defiende May.
La propuesta modifica las normas del Parlamento de forma excepcional y para un solo día, el 27 de marzo, para que los diputados puedan debatir y votar fórmulas alternativas sobre el Brexit en lo que se conoce en jerga parlamentaria como "voto indicativo". Así, los diputados previsiblemente podrán votar sobre un "Brexit más blando" o plantear la posibilidad de convocar un segundo referéndum.
Con esta votación se plasma la derrota de May, que había ofrecido a los Comunes una serie de votaciones alternativas sobre el Brexit dirigidas siempre por el Gobierno porque permitir al Parlamento asumir la agenda del Brexit sería "un precedente desagradable".