La estampida que ha dejado seis muertos en una discoteca de Italia podría deberse, dice el primer ministro, a un exceso de aforo: "Parece que se vendieron 1.400 entradas y parece que solo una de las tres salas de la discoteca estaba abierta en ese momento. Una sala con una capacidad máxima de 469 personas".
Una hipótesis que todavía se investiga. "Hay varias autoridades entregadas en las tareas de búsqueda, verificando los permisos y las autorizaciones", ha afirmado Monica Garulli, fiscal de Ancona.
A esto se suma el supuesto uso de un gas urticante dentro de la discoteca que desataba el pánico entre los asistentes. En este sentido, Oreste Capocasa, jefe de Policía de Ancona ha declarado: "Necesitamos investigar porque el spray de pimienta aparece con frecuencia en las declaraciones de los adolescentes".
El vídeo muestra a los jóvenes, la mayoría de entre 16 y 18 años, huyendo por un pequeño puente que acaba cediendo. Caen a un foso, y en medio del caos, algunos escapan pisotenado a los caídos, mientras otros intentan echar una valla abajo para liberar a la gente.
"Tengo el corazón hecho pedazos. En 35 años nunca he visto una cosa así", ha manifestado Oreste Capocasa, visiblemente emocionado.
Los más de 1.000 jóvenes reunidos allí iban a ver a un famoso cantante italiano. Un ídolo entre los adolescentes que ha mostrado su pésame a través de las redes sociales: "Es difícil encontrar las palabras adecuadas para expresar el dolor de esta tragedia. Todo mi amor y apoyo a las familias de las víctimas y los heridos".
Un centenar de heridos, 13 de ellos graves, han sido trasladados a diferentes hospitales.
