Acaban cuatro años de Donald Trump marcados por la guerra comercial con Europa y el proteccionismo. Federico Steinberg, investigador del Real Instituto Elcano, nos cuenta que el presidente saliente ha visto a la Unión Europea como una "rival" y no como una "aliada", implementando aranceles al aluminio y al acero y a productos agroalimentarios.
Uno de los más afectados ha sido el sector del vino español, grabado con un arancel adicional del 25%. José Luis Benítez, director general de la Federación Española del Vino, cuantifica estas pérdidas para el sector en un 19%.
Con Trump, las exportaciones de aceite de oliva español han caído un 77%. El sector pide a la Unión Europea que negocie el fin de la guerra comercial con la nueva administración norteamericana, con impuestos a la exportación que suponen un coste anual de 7.500 millones de dólares para la Unión Europea y de 1.270 para España.
La llegada de Joe Biden a la Casa Blanca podría revertir, o al menos mitigar, las políticas proteccionistas. Steinberg ve "muy probable" que no se vean nuevos aranceles y que, a medio plazo, "se eliminen algunos".
No cambiará la exigencia a Europa para que aumente su gasto militar, una obsesión de Trump. Los aliados de la OTAN acordaron alcanzar, en 2024, una inversión en Defensa del 2% de su PIB, algo que Ayala avanza que "no se va a cumplir en términos generales". En España, sin ir más lejos, destinamos el 1,16% del PIB en Defensa.