Atkins dijo a la agencia oficial Andina que "el daño ecológico es tremendo e irreparable" porque el crudo ha llegado al río Mayuriaga, cuyas aguas desembocan en el río Morona, afluente a su vez del Marañón, en cuya confluencia con el Ucayali forma el río Amazonas.
El corte fue realizado a la altura del kilómetro 193 del oleoducto, en un punto que está a 500 metros de la comunidad de Mayuriaga, en la amazónica región de Loreto, por personas disconformes con los resultados de las elecciones municipales celebradas hace apenas un mes, en octubre.
Los autores del sabotaje habían "secuestrado" hace dos semanas a veinte trabajadores de Petroperú en una estación petrolera de la zona y al retirarse de las instalaciones dejaron por escrito la amenaza de que dañarían el oleoducto si no se anulaban los resultados de los comicios, relató Atkins.
Ante esta amenaza, Petroperú había suspendido el bombeo de crudo por el oleoducto, pero a pesar de ello la tubería todavía tenía cierta presión en el momento que se le practicó el corte. El presidente de Petroperú recordó que el 70 % de los daños que el oleoducto ha sufrido en los últimos cuatro años "han sido este tipo de atentados". "Creo que ya es hora de que se aplique la ley porque debe ser igual para todos los peruanos.
El oleoducto está considerado como un activo nacional crítico, y de acuerdo a la ley, quien lo dañe debería tener una pena de cárcel de seis a diez años", apuntó. La empresa ha solicitado ayuda a la Policía y a la Fiscalía para que les brinden protección en la zona y proceder con las reparaciones pertinentes.
Los autores del sabotaje al oleoducto denuncian irregularidades por parte de la agrupación del partido Restauración Nacional que ganó la votación a la alcaldía del distrito de Morona, uno de los seis que forman la provincia de Datem del Marañón, en Loreto. Por su parte, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) indicó en un comunicado que está a la espera que la Policía y los fiscales acudan a la zona para poder verificar con seguridad los daños causados y las acciones de la empresa para repararlos.
El Oleoducto Nor Peruano, operativo desde 1977, transporta el petróleo extraído en la selva peruana hasta el terminal portuario de Bayóvar, en el océano Pacífico, mediante 1.106 kilómetros de tuberías que atraviesan la Amazonía y la cordillera de los Andes. La instalación estuvo paralizada cerca de un año por mantenimiento después de que se sucedieran una decena de fugas en la tubería, la mayoría por cortes causados por habitantes de las zonas aledañas.