Estados Unidos ha puesto "en alerta" a 8.500 soldados ante el aumento de la tensión con Moscú por el conflicto con Ucrania, aunque todavía no se ha adoptado ninguna decisión sobre un despliegue en el este de Europa.
El portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, John Kirby, ha señalado que estas unidades militares, la mayoría terrestres, estarán listas en caso de que Rusia decida avanzar hacia Ucrania. "No las estamos desplegando ahora, no estamos diciendo que la diplomacia ha muerto", ha asegurado antes de manifestar que al estar en "alerta elevada", se recorta el tiempo de preparación para desplegarse de diez a cinco días.
Asimismo, Kirby ha puesto destacado que el grueso de las tropas estadounidenses -con efectivos terrestres, aéreos y marítimos- se desplegaría en países del este de Europa dentro de la Fuerza de Respuesta de la OTAN (NRF, por sus siglas en inglés), por lo que se activarían únicamente si la alianza atlántica lo solicita.
No obstante, no descarta un posible despliegue de EEUU "unilateral" fuera de la NRF, aunque ha insistido que en ese caso siempre sería en coordinación y tras consultas con los aliados.
Preguntado sobre en qué lugares se produciría el despliegue estadounidense, no ha ofrecido más detalles y se ha limitado a decir que sería en naciones aliadas del flanco este de la OTAN. El contingente estadounidense, ha dicho, estaría integrado por brigadas de combate, que contarían con el respaldo de equipos logísticos, médicos y de la aviación, entre otros.
La Casa Blanca aborda un posible despliegue con sus aliados en Europa
La Casa Blanca ha abordado con sus aliados europeos un posible despliegue de tropas estadounidenses en el este de Europa. "Hemos estado consultando con nuestros aliados y detallando los planes para todos los escenarios. Siempre hemos dicho que reforzaríamos a nuestros aliados en el flanco este y lo hemos estado discutiendo con nuestros socios durante las últimas semanas", ha indicado la portavoz del Gobierno, Jen Psaki, en una rueda de prensa.
Pese a este aumento de la retórica desde el país norteamericano, los ministros de Exteriores de la UE no aprecian todavía un riesgo de "ataque inminente" a Ucrania. "No, no creo que haya nada nuevo que pueda incrementar el sentimiento de miedo sobre un ataque inminente", apuntó el representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, en una rueda de prensa al término del Consejo de ministros comunitarios de Exteriores, al que Blinken se unió por videoconferencia.
De hecho, los miembros de la UE no van a seguir de momento la medida adoptada por Washington de retirar a personal no esencial de su Embajada en Kiev, y ello pese a que la Casa Blanca pidió este lunes a los estadounidenses en Ucrania que "salgan ya" del país.
Biden habla de "total unanimidad" con Europa
Por su parte, el presidente estadounidense aseguró este lunes que hay "total unanimidad" entre su postura y la de sus aliados europeos en cuanto a la concentración de tropas rusas en la frontera con Ucrania. "He tenido una reunión muy, muy, muy buena. (Hay una) unanimidad total con todos los líderes europeos", dijo Joe Biden en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca.
El mandatario se pronunció así, sin dar más detalles, después de mantener una conversación de una hora y veinte minutos con la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen; y el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, entre otros, para coordinar la respuesta a la crisis de Ucrania.
En la videollamada también participaron el presidente de Francia, Emmanuel Macron; el canciller alemán, Olaf Scholz; el primer ministro italiano, Mario Draghi; el presidente polaco, Andrzej Duda, y el primer ministro británico, Boris Johnson, además del presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
En un tuit posterior, Biden aseguró que los líderes habían conversado sobre "los esfuerzos conjuntos para disuadir una mayor agresión por parte de Rusia, como los preparativos para imponer duros costes económicos a Rusia y reforzar la seguridad en el flanco este" de la OTAN.
La Casa Blanca añadió después, en un comunicado, que los participantes en la llamada "subrayaron su deseo compartido de una resolución diplomática de las tensiones actuales", además de "repasar sus recientes contactos con Rusia en múltiples formatos".
Los líderes "se comprometieron a continuar sus consultas estrechas con sus aliados y socios transatlánticos, incluido a través de la UE (Unión Europea), la OTAN y la OSCE (Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa)", según el comunicado oficial.