El coronavirusse ha cobrado ya 80.033 vidas en Estados Unidos, epicentro de la pandemia con un total de 1.323.051 casos positivos confirmados, según el último recuento. Hasta la fecha, se han recuperado 240.760 pacientes.

Son cifras que salen a la luz cuando muchos de los estados del país norteamericano han iniciado ya su reapertura, incluidos algunos de los más afectados por la pandemia, como Nueva Jersey, donde se ha informado de 138.532 casos. Entre los estados más afectados están Nueva York, Nueva Jersey, Massachusetts, Pensilvania, Luisiana, Michigan, Connecticut y California.

La evolución del virus en EEUU incluye una meseta en la curva de contagios con en torno a los 25.000-30.000 nuevos casos diarios desde que comenzó el mes de abril, aunque el gráfico de fallecidos refleja un ligero pero continuo descenso, que sin embargo no ha bajado de los 1.000 muertos diarios desde el 30 de marzo.

A pesar de estos datos de afectación, el presidente de EEUU, Donald Trump, sigue apostando por la reapertura económica, aunque él mismo ha aceptado que esto puede suponer un riesgo de nuevos contagios.

La Casa Blanca ha dejado en manos de los gobernadores y otras autoridades locales el proceso de desescalada del país, aunque el propio Trump en Twitter ha llamado a "liberar" a aquellos estados con medidas de confinamiento más estrictas, como Michigan, gobernado por los demócratas.

Por el momento, 35 de los 50 estados de EEUU ya han abierto playas, restaurantes y peluquerías, mientras que el resto sigue mantiene medidas de restricción.

Por otra parte, Trump ha respondido a las críticas del expresidente Barack Obama a su gestión de la crisis sanitaria, acusándole a él y al que fuera su vicepresidente, Joe Biden, de no haber tenido "ni idea" durante su "desastre" de la gripe porcina de 2009.

Entretanto, varios miembros del equipo de la Casa Blanca han dado positivo en COVID-19, entre ellos Katie Miller, la portavoz de prensa del vicepresidente Mike Pence, que pese a ello no tiene previsto ponerse en cuarentena preventiva. Miller a menudo asiste a las reuniones en las que participa el vicepresidente, las mismas que preside el presidente. También un asistente personal del propio Trump y una asesora de su hija Ivanka han dado positivo.

Como resultado de esos contagios, tres figuras clave para la respuesta ante el virus tomarán precauciones: están en aislamiento estricto Robert Redfield, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y Stephen Hahn, que dirige la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Por su parte, el principal epidemiólogo del Gobierno estadounidense, el doctor Anthony Fauci, guardará una cuarentena "parcial", en la que trabajará desde casa, pero acudirá a algunas reuniones protegido con mascarilla.