Los vecinos de Luco de Jiloca, una pedanía de Calamocha (Teruel), se han movilizado para hacer frente a tres de los grandes retos a los que se enfrenta nuestro país en la actualidad.
Por un lado, hacer frente a la despoblación en una pedanía que cuenta solo con 63 habitantes. Por otro, hacer frente a la transición ecológica hacia energías más limpias y menos contaminantes. Y, entre medias, recortar hasta el 50% de la factura de la luz, que tanto ha subido en los últimos meses.
El instrumento para conseguirlo es Luco Energía, una cooperativa en la que participan 27 socios -entre los que se incluyen una empresa local y el Ayuntamiento de Calamocha- y que aspira a suministrar energía a toda la localidad. Para ello han instalado 92 placas solares con una potencia estimada de 60 KW de potencia.
El proyecto lo explica su presidente, Carlos Aríñez, vecino de localidad y uno de sus impulsores. "La instalación a la red de baja tensión existente y, a partir de ya, repartiremos la energía generada a los socios de la cooperativa", afirma a laSexta.
La iniciativa ha generado mucho entusiasmo entre los vecinos. No solo por la reducción en el recibo, también por la atracción y fijación de población joven en el municipio. "Todo lo que haga la gente joven es bueno", se alegra uno de sus habitantes. "Es fundamental que haya iniciativas para que esto siga adelante", opina otro.
Un ejemplo es el de María Navarro, vecina y vicepresidenta de la cooperativa. "Volví hace cinco inviernos. Lo cuento en inviernos porque es la época más dura", subraya mientras camina por las calles del pueblo. La opción de trasladarse al pueblo surgió porque su familia buscaba un sitio más pequeño y acogedor donde vivir. Y, ahora, impulsa esta sociedad.
"Las ventajas que tiene este proyecto es una cuestión social, de comunidad, de futuro. Soy de las que piensa que el movimiento llama al movimiento", sonríe.
La iniciativa se ha financiado a través de crowdfunding, con la aportación de unos 1.000 euros por vecino y también con fondos FEDER, que han aportado un 20% de la inversión, calculada en 70.000 euros. El Gobierno de Aragón quiere ahora replicar la iniciativa en otros pueblos con los fondos Next Generation.