Los vecinos de El Frago, una pequeña localidad de Zaragoza, ya pueden hacer la compra sin tener que salir del pueblo. Y lo pueden hacer gracias a una pequeña tienda que acaba de abrir para los vecinos.
Como cuenta Cristina, una vecina del pueblo, antes tenían que ir hasta Zaragoza para comprar y esta iniciativa "le da vida al pueblo".
Desde El Frago a un supermercado hay unos 40 kilómetros de distancia y desde Biel, otro pequeño pueblo cercano, hay más de 50. Por ello, una iniciativa ciudadana ha puesto en marcha dos tiendas multiservicios. Los vecinos llevaban una década sin poder ir a comprar productos de primera necesidad andando.
Los sabe bien Celia, que regenta el único bar del pueblo. "A mi me viene porque el otro día por ejemplo me quedé sin leche". La tienda le sirve para solucionar problemas de última hora en la cocina.
Los productos, además, son de cercanía, ecológicos y algunos se venden a granel para reducir el uso de plásticos. Los vecinos lo celebran como "un gran avance".
Además, al pueblo va una peluquera una vez al mes. Son iniciativas que buscan llenar de vida la España vaciada. "Si son vecinos de primera a la hora de pagar impuestos, no podemos ser vecinos de tercera a la hora de no poder comparar ni un paquete de sal", reivindica José Ramón Reyes, alcalde de El Frago.
Este proyecto se ha puesto en marcha gracias a fondos europeos. De hecho el Parlamento Europeo reclama que se ponga el foco en el mundo rural para atajar el creciente problema de la despoblación.