Los registros que buscó el FBI en la propiedad del expresidente de Estados Unidos Donald Trump en el resort Mar-a-Lago de Florida incluían documentos clasificados relacionados con las armas nucleares, según ha informado el diario 'The Washington Post' y que poco después ha negado Trump a través de sus redes.
Expertos en información clasificada consultados por el citado diario han asegurado que los agentes federales mostraron una "profunda preocupación" durante la búsqueda de documentos ya que pensaron que información sobre armas nucleares podrían estar en peligro, ya que potencialmente podían caer en las manos equivocadas. No obstante, no ha trascendido si dichas armas pertenecían a Estados Unidos o si bien eran documentos recuperados de otros países.
El informe del Post se produce después de que el Departamento de Justicia (DOJ) presentara una moción el jueves para solicitar que un tribunal de Florida revele la orden de allanamiento ejecutada por el FBI, después de las acusaciones de Trump sobre una supuesta persecución por parte de los agentes federales y la Administración Biden.
"El interés claro y poderoso del público en comprender lo que ocurrió bajo estas circunstancias pesa mucho a favor de la revelación", ha expresado el Departamento de Justicia y ha podido saber 'The Hill'.
"Esto de las armas nucleares es un engaño", ha asegurado Trump en un mensaje publicado en su plataforma Truth Social, y en el que describe como "tipos sórdidos" a los agentes federales involucrados en el registro. T
Simpatizantes y seguidores del expresidente han convocado una serie de movilizaciones para protestar por la redada del FBI a la casa en Florida de Trump. El expresidente ha acusado a los agentes federales de estar llevando a cabo una persecución contra su persona.
Trump pide la publicación "inmediata" de la orden de registro a su casa
Frente a la gravedad de los hechos que investiga el FBI y que se suman a las otras causas judiciales que tiene abiertas el expresidente, Trump se ha mostrado a favor de que se haga pública la orden de registro de su casa.
En dos mensajes publicados en la red social Truth, el exmandatario respondió al fiscal general, Merrick Garland, quien unas horas antes había solicitado autorización a un tribunal del sur de Florida para que hiciese pública dicha orden, algo a lo que Trump podría haber presentado objeciones si así lo hubiera deseado.
Garland reveló el jueves que autorizó personalmente la decisión de solicitar la orden de registro del pasado lunes en la residencia de Trump en Florida y pidió autorización a un tribunal del sur de este estado para que haga pública dicha orden.
En una breve declaración tras la que no aceptó preguntas, Garland defendió la legalidad del registro y señaló que este tipo de decisiones no se toman "a la ligera". Siempre que es posible, aclaró, se opta por medios "menos intrusivos" como alternativa. Por su parte, Trump insiste en que se trata de una persecución política.