Muy conocido se ha hecho en los últimos días el caso de Masha Moskaleva, alumna de sexto grado en la ciudad de Efremov, al sur de Moscú, a raíz de un dibujo que ha provocado estragos en su familia y un auténtico torrente de opiniones a nivel internacional. La joven, de 12 años, pintó las banderas rusa y ucraniana en un dibujo en el que escribió "no a la guerra" y "gloria a Ucrania". En el mismo dibujó retrató a una mujer con un niño y cohetes saliendo de la bandera rusa.
Al ver su dibujo, la profesora denunció el mismo al director de la escuela, quien hizo lo mismo con la policía, lo que ha llevado a que en Rusia se hayan instaurado severas penas contra la familia al considerarse que 'desacredita' al ejército ruso. Alexei Moskalev, que es padre soltero, fue detenido, mientras la pequeña fue llevada al centro de menores. La represión contra la familia por un simple dibujo ha desatado un conflicto interno en el país.
Prueba de ello es la imagen que ha protagonizado el grupo de punk Naïve. En concreto, la del cantante, Alexander Ivanov, quien durante un concierto de su banda en Moscú habló en el escenario del caso de Moskaleva. Portando una camiseta con el nombre de la pequeña, Ivanov se dirigió al público para pedirle que tuviera muy presente lo ocurrido y lo denunciara. La respuesta del público fue abrumadora.
"Daos cuenta de lo que le ha pasado a Masha y a su familia por un dibujo que hizo para una tarea de clase", dijo el músico en un tono serio ante un público que, enfervorizado, respondió con un mensaje claro: "¡A la mierda la guerra, a la mierda la guerra!". Desde la publicación de su disco 'Post Alcoholic Anxieties', en 1997, Naïve se ha convertido en una de las bandas de punk más populares y comercialmente exitosas de Rusia.