Pilar Martínez iba a bordo del vuelo de Ethiopian Airlines siniestrado donde han muerto 157 personas. Era una cooperante de 32 años natural de Cangas do Morrazo, en Pontevedra.
En su pueblo natal las banderas ondean a media asta, y el alcalde, amigo de la familia de Pilar, ha decretado tres días de luto en su memoria. "En señal de solidaridad del pueblo de Cangas por una chica tan joven y solidaria como era Pili", ha señalado Xosé Manuel Pazos, alcalde del municipio gallego.
La familia de Pilar, muy afectada, destaca la ilusión que tenía. "Murió escribiendo en el ordenador que estaba cumpliendo el sueño de su vida", cuenta Paco, familiar de la víctima. Jordi Dalmau es la otra víctima mortal española. Un ingeniero químico de Granollers de 46 años que viajaba a Nairobi por trabajo.
POr su parte, la investigación avanza y se han encontrado las dos cajas negras del aparato. Un boeing 737 MAX 8. Su analisis desvelará las causas de la tragedia, sólo 6 minutos después de despegar en Adis Abeba.
Además, la aerolínea ha ordenado que toda la flota de ese modelo de avión se quede en tierra. "Lo hemos ordenador como medida extra de seguridad", destaca Yilma G. Gobena, director de Ethiopian Airlines. Una medida que también ha tomado la aviación de varios países.
Muchas de las víctimas de la tragedia aérea se dirigían a la cumbre de medioambiente de la ONU en Nairobi, que ha arrancado con un minuto de silencio en memoria de los fallecidos.