El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha cancelado la visita de dos de sus principales asesores a Washington esta semana porque EEUU no ha utilizado su derecho de veto, sino que se ha abstenido, este lunes en el Consejo de Seguridad de la ONU, que ha aprobado por primera vez una resolución que pide un alto el fuego en la Franja de Gaza. Israel lo considera un "retroceso de las relaciones", pero Estados Unidos asegura que su abstención "no representa un cambio en su postura".
Se trata del primer texto que alcance el consenso del Consejo de Seguridad, después de los tres vetos anteriores de Estados Unidos, que se ha abstenido en esta ocasión, provocando el enfado del primer ministro israelí. De hecho, las relaciones entre ambos países llevan resentidas semanas. Primero por el plan de Israel de invadir de forma terrestre Rafah -ciudad al sur de Gaza con más de un millón de palestinos-, y después por esta abstención. Una abstención que habría sido un 'sí', pero la resolución no condena a Hamás, según confirma el Gobierno de EEUU.
"Es un poco sorprendente y desafortunado que no vayan a asistir a estas reuniones. El viernes en Tel Aviv, después de reunirse con el primer ministro Netanyahu y otros miembros del Gobierno israelí, creemos, primero, que una invasión a gran escala en Rafah sería un error", ha asegurado el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller. Consideran, además, que "sería un error por el daño civil que causaría, que sería inmenso" porque hay alrededor 1,4 millones de personas en Rafah". Esto se suma a que, según Miller, el "Gobierno de Israel no ha presentado un plan creíble para evacuar a esas personas a otras áreas y cuidar de ellas una vez desplazadas".
Asimismo, ha señalado que también piensan que "este tipo de invasiones debilitaría la seguridad de Israel". Por su parte, el secretario del Departamento de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha transmitido este lunes al ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, que existen otras alternativas a la ofensiva sobre la ciudad de Rafah.
Matthew Miller, además, ha asegurado que la resolución de la ONU "no es vinculante", a pesar de que el Artículo 25 de la Carta de Naciones Unidas recoge que los países miembros "convienen en aceptar y cumplir" las decisiones del organismo. Sin embargo, para el ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, la decisión de Estados Unidos de abstenerse supone "un error moral y ético" que dañará a las autoridades israelíes en las negociaciones con Hamás. "Hamás trabaja sobre el hecho de que habrá un alto el fuego sin la necesidad de tener que pagar nada".
"Desde nuestro punto de vista, es un mensaje, un mensaje que no es bueno, para todos los que están del lado de Hamás, sobre que Estados Unidos no apoya tanto a Israel", ha argumentado el ministro, según ha recogido el diario israelí 'The Times of Israel'. Sin embargo, Estados Unido insiste en que no cambiará nada en sus relaciones con el Estado judío.
Hamás celebra la resolución
El Consejo de Seguridad de la ONU ha aprobado por primera vez, y tras cuatro intentos fallidos previos, una resolución en la que se pide inequívocamente un alto el fuego en la guerra en la Franja de Gaza, donde ya han muerto más de 32.200 personas. La resolución ha sido aprobada por 14 votos a favor y una abstención, la de Estados Unidos, y al aprobarse ha suscitado los aplausos de la sala, cosa que raramente sucede, ya que hasta ahora había vetado todas las resoluciones presentadas en este sentido.
Hamás ha celebrado este lunes la aprobación por parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de la resolución en la que se demanda un alto el fuego inmediato en la Franja de Gaza y exige que se presione a Israel para que se adhiera a esta medida. "Acogemos con beneplácito el llamamiento del Consejo de Seguridad de la ONU para un alto el fuego inmediato en Gaza. Destacamos la necesidad de alcanzar un alto el fuego permanente que conduzca a la retirada de todas las fuerzas sionistas y el regreso de los desplazados", ha señalado Hamás, según recoge el diario 'Filastin'.
"Hacemos un llamamiento al Consejo de Seguridad para que presione a la ocupación para que se adhiera al alto el fuego y detenga la guerra de genocidio y limpieza étnica contra nuestro pueblo", ha reclamado el movimiento islamista. Asimismo, Hamás ha expresado su disposición a participar en un proceso "inmediato" de intercambio de "prisioneros", al mismo tiempo que ha subrayado la necesidad de que se establezca la libertad de movimientos en el enclave palestino para la correcta entrega de ayuda humanitaria.
Por último, Hamás ha agradecido a Argelia, quien ha impulsado esta última resolución, por sus esfuerzos, así como al resto de países del Consejo se Seguridad que han estado trabajando para "detener la agresión sionista y el genocidio".