Más de 100.000 evacuados
De huir en coche a hacerlo a pie con lo puesto: la lucha de los evacuados por los incendios en Los Ángeles
A medida que las llamas avanzan a gran velocidad, miles de residentes de California se ven obligados a abandonar sus hogares entre el caos y la angustia, mientras las autoridades luchan contra el fuego.
Con las llamas cada vez más cerca, miles de residentes en California enfrentan una lucha desesperada por escapar de los incendios forestales que han obligado a evacuar a más de 200.000 personas. Entre ellos, Aaron y su suegro, un hombre con movilidad reducida, vivieron una angustiosa odisea para huir a pie tras abandonar su coche en una carretera congestionada por vehículos.
"Está bien, te tengo", repetía Aaron mientras ayudaba a su suegro, que se tambaleaba con su andador. La situación se volvía cada vez más precaria, pero Aaron, con la ayuda de un vecino, logró guiarlo hasta la acera, utilizando un palo improvisado para darle soporte mientras buscaba su andador. "Date la vuelta. Lo tenemos bajo control", le animaba. Finalmente, con el andador recuperado, continuaron su camino cuesta abajo, alejándose de las llamas que devoraban su vecindario.
El caos no se limita a las calles. Matt Baker, evacuado de Palisades, salió con lo poco que pudo rescatar de su hogar y su coche lleno de recuerdos. Desconsolado, expresó al reportero de CBS: "No lo sé", antes de romper a llorar al ser preguntado por sus planes futuros.
Mientras tanto, las carreteras de Los Ángeles se llenaron de atascos interminables. En Hollywood, largas filas de luces rojas marcaban el éxodo masivo de ciudadanos intentando escapar del fuego. "Todas esas luces son personas tratando de alejarse lo más posible del incendio", relató un conductor.
Los bulldozers trabajan contrarreloj para despejar los caminos bloqueados por vehículos abandonados, mientras las autoridades advierten que el fuego avanza a una velocidad alarmante, poniendo en peligro no solo a quienes aún no han evacuado, sino también a los equipos de emergencia.
Los incendios, alimentados por fuertes vientos y altas temperaturas, han dejado una estela de devastación en varias comunidades. Las autoridades continúan instando a los ciudadanos a seguir las órdenes de evacuación y buscar refugio seguro mientras luchan por contener las llamas.