El futuro de la isla, en el aire

¿Y si la idea de Trump de hacerse con Groenlandia no es tan loca? Dinamarca se abre a negociar la venta de la isla a Estados Unidos

Los detalles Tanto el ministro de Exteriores de Dinamarca como el primer ministro de Groenlandia han abierto la puerta a dialogar con EEUU sobre la soberanía de la isla.

El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump

Las pretensiones de Donald Trump de lograr el control de Groenlandia podrían no estar tan lejos de hacerse realidad como parecía en un principio. Tras las presiones del presidente electo, Dinamarca se ha abierto por primera vez a negociar con Estados Unidos.

"En estrecha cooperación con Groenlandia, estamos dispuestos a continuar las conversaciones con el presidente entrante para garantizar los legítimos intereses estadounidenses", ha dicho Lars Lokke Rasmissen, ministro de Asuntos Exteriores de Dinamarca.

Pero el Ejecutivo danés no es el único que apuesta por explorar esa vía. El primer ministro de Groenlandia, Mute Egede, ha instado a sus ciudadanos a estar "preparados" para posibles cambios en la isla: "Groenlandia está en camino hacia una nueva era. Debemos estar unidos para estar preparados para el nuevo futuro al que nuestro país se dirige".

Ante estos movimientos, y con el objetivo de rebajar la tensión, desde el entorno de Trump aseguran que la cuestión de Groenlandia no va a desatar ninguna guerra en Norteamérica. "No necesitamos usar la fuerza militar", ha explicado JD Vance, vicepresidente electo y mano derecha del líder republicano.

Mientras tanto, Rusia, que se ha tomado las palabras de Trump como una amenaza hacia sus intereses geopolíticos y comerciales, denuncia una posible violación de las normas internacionales.

"No se puede permitir una violación del derecho internacional en perjuicio de otros. El Ártico debe ser un territorio de paz y concordia", ha declarado Valentina Matviyenko, presidenta del Senado de Rusia.