Un episodio de brutalidad policial ha sacudido a la comunidad de Phoenix, Arizona, después de que dos agentes propinaran una violenta paliza a Tyron, un hombre negro, sordo y con parálisis cerebral, tras una falsa acusación de robo. Las imágenes del suceso son desgarradoras.
El incidente comenzó cuando un hombre blanco señaló a Tyron frente a una tienda, acusándolo de haberle robado el móvil y empujado. Sin más prueba que esta acusación, los oficiales se acercaron rápidamente al joven. "¡Detente donde estás!", grito uno de los agentes antes de reducirlo violentamente al suelo. Sin mediar más explicación, comenzaron a golpearlo repetidamente en la espalda, brazos y rostro, mientras Tyron intentaba protegerse. Durante la agresión, fue sometido además a varias descargas eléctricas con una pistola táser, lo que intensificó su sufrimiento.
A pesar de que una testigo en la escena advirtió a los agentes que Tyron era sordo y parecía parálisis cerebral, estos continuaron con su ataque "¡Pon tus manos detrás de la espalda!", ordenaron los oficiales, pero los gritos de dolor del hombre no parecieron suficientes para detener la violencia.
El abogado de Tyron, Jesse Sohwalter, ha calificado la intervención policial de "excesiva, innecesaria e irrazonable". "Mi cliente no había hecho nada malo, y la brutalidad con la que fue tratado es una violación clara de sus derechos", afirmó.
Por su parte, la policía de Arizona ha abierto una investigación interna, aunque los agentes implicados asegura que Tyron se resistió y que incluso uno de ellos fue mordido. Mientras tanto, el joven pasó 24 días en prisión y ahora enfrenta res cargos graves.