Uno de ellos, Maher
Abdulaziz Mutreb, es un acompañante habitual del príncipe heredero en sus
viajes al exterior y el rotativo neoyorquino lo ha identificado desembarcando
de su avión en París y Madrid, y entre su círculo de seguridad en Naciones
Unidas, Houston y Boston (Estados Unidos).
Otros tres implicados
también son parte del anillo de seguridad de Mohamed bin Salman, mientras que
un quinto es un médico forense del Ministerio del Interior saudí, cuya supuesta
relación con el príncipe heredero no detalla el The New York Times.
Estos cinco implicados
forman parte del grupo de quince funcionarios saudíes que llegaron en dos
aviones a Turquía horas antes de que Khashoggi desapareciera el pasado 2 de
octubre en el consulado de Arabia Saudí en Estambul.
The New York Times ya
informó este lunes que Arabia Saudí planea reconocer que Khashoggi murió bajo
su custodia en un interrogatorio que se les fue de las manos en el consulado y
culpar a de ello a un funcionario amigo del príncipe heredero.
Sin embargo, hasta la
fecha, Riad ha negado cualquier implicación en la desaparición del periodista.
Turquía registró este lunes -dos semanas después de la desaparición de
Khashoggi- el consulado saudí en Estambul en busca de pruebas de lo sucedido.
Según algunos medios turcos y estadounidenses, Ankara dispone de de grabaciones
de vídeo y audio que demuestran que Khashoggi fue asesinado en la sede
diplomática.