La Fiscalía de Bolivia ha anunciado este jueves la imputación formal de dos jesuitas bolivianos y de otro español acusados de "encubrimiento" en uno de los casos de pederastia que se investiga en el país y que, supuestamente, fue cometida por otro integrante de la Compañía de Jesús ya fallecido.
Los sacerdotes imputados son los bolivianos Osvaldo A.C.P. y Bernardo L.M.V. y el español Ignacio S.E., ha señalado el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, según un comunicado de prensa del Ministerio Público.
Los tres están acusados "por el delito de encubrimiento a favor del entonces arzobispo de La Paz, el español Alejandro Mestre, que en el año 1961, cuando cumplía funciones dentro de un establecimiento educativo, violó a un niño en dos oportunidades", ha indicado Lanchipa.
El fiscal ha solicitado medidas cautelares para los jesuitas, entre ellas, la prohibición de salir del país y de comunicarse con la víctima, la obligación de presentarse ante la autoridad que el juez designe y la detención domiciliaria.
La Fiscalía ha señalado en su comunicado que, en noviembre de 2021, el entonces encargado de ambientes sanos de la Curia Provincial, Osvaldo A.C.P., se enteró del caso y lo remitió al entonces jefe provincial de la Curia, Ignacio S. E., quien instruyó una investigación enmarcada en el "derecho canónico que rige a la Iglesia Católica". La investigación fue dirigida por Osvaldo A.C.P., quien determinó finalmente cerrar el caso, lo cual fue aprobado por el actual provincial de la Compañía de Jesús en Bolivia, Bernardo L. M. V., según la misma fuente.
El Ministerio Público indicó que, "pese a tener conocimiento de la existencia de indicios del hecho delictivo", los tres jesuitas no lo reportaron a las autoridades para que hubiera una investigación penal, por lo que consideró que hubo una "aparente intención de encubrir las agresiones sexuales que habría cometido" el español Mestre. La Compañía de Jesús formalizó la denuncia contra el exarzobispo en mayo de 2023, cuando salió a la luz el caso de los presuntos abusos sexuales cometidos por el jesuita español Alfonso Pedrajas Moreno contra decenas de niños y adolescentes cuando estuvo al frente de un colegio en el país, desde 1971, y que dio lugar a otras denuncias. A raíz del caso de Pedrajas, comenzaron a salir a la luz otras acusaciones contra otros sacerdotes, algunos ya fallecidos, de abusos sexuales a menores.