La Policia de Nueva York encontró dos cuerpos a orillas del río Hudson que corresponden a dos chicas saudíes, hermanas de 16 y 22 años, que aparecieron tumbadas y atadas frente con frente con cinta adhesiva en pies y cabeza. Las dos estaban vestidas y sin ningún tipo de violencia aparente.
Desaparecieron en agosto y no se sabía nada de ellas desde entonces. Rotana, la hermana mayor, vivía sola en un apartamento en Nueva York; mientras que Tala, la pequeña, vivía en Virginia con su familia.
Hacía dos meses que la Policía buscaba incansable a las dos hermanas y llegó a pedir ayuda a través de las redes sociales difundiendo los retratos robot de las jóvenes por si alguien las podía identificar.
Detectives de Nueva York siguen buscando cualquier pista para resolver este crimen. Por su parte, la madre de las niñas ha contado que un día antes de que sus cuerpos aparecieran en el Hudson, recibió una llamada de la embajada de Arabia Saudí.
Le dijeron que sus hijas habían pedido asilo en Estados Unidos sin dar ningún motivo y le comunicaron a la madre que tenían que abandonar el país de forma inmediata.
Por el momento, este caso es una incógnita. La Policía sigue trabajando para dar respuesta a todas las preguntas que envuelven este caso, entre ellas, qué papel juega la llamada de la embajada saudí.