El Ejército israelí ha anunciado este miércoles que ya controla "tácticamente" el Corredor Filadelfia de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, que recorre la frontera con Egipto y donde según Israel se han detectado unos 20 túneles hacia el país vecino usados por Hamás para introducir armas en el enclave.

"Esto no significa que tengamos fuerzas sobre el terreno en todo el corredor, pero sí que podemos controlar y tenemos la capacidad de cortar la línea" de suministros de Hamás en la zona, ha indicado un funcionario militar en rueda de prensa.

El funcionario aseguró que también han encontrado unos 82 puntos de acceso a los túneles, algunos de los cuales ya se conocían antes de la operación, y que las fuerzas armadas israelíes han informado a sus contrapartes egipcias de sus hallazgos.

Sin embargo, una fuente egipcia de alto rango ha trasladado a EFE que no hay comunicaciones con la parte israelí sobre túneles en la frontera de Gaza con Egipto. La misma ha indicado que Israel está utilizando estas acusaciones para justificar la continuación de la operación en Rafah y la prolongación de la guerra con fines políticos.

Tras el anuncio, las fuerzas armadas israelíes han asegurado haber destruido un túnel de un kilómetro y medio que se separaba en varios caminos y en el que encontraron misiles antitanque, granadas, explosivos y fusiles automáticos. "La ruta incluía un escondite, baños y habitaciones adicionales. Todas las rutas y complejos fueron destruidos", reza un comunicado del Ejército, que afirma que la entrada al túnel se encontraba a apenas 100 metros del paso fronterizo de Rafah hacia Egipto.

Decenas de desplazados muertos en Rafah

Las fuerzas israelíes comenzaron el pasado 6 de mayo una operación militar en Rafah, en el extremo más al sur de la Franja de Gaza, pese a las advertencias de gran parte de la comunidad internacional, ya que la localidad servía de refugio a más de un millón de palestinos desplazados por la guerra.

Las autoridades israelíes, que siguen definiendo sus ataques en Rafah como una "operación limitada", al igual que Estados Unidos, defienden que entrar en el sur era necesario ya que todavía operan en la zona cuatro batallones del grupo islamista. "Una parte clave de Hamás es su infraestructura subterránea, y sus operaciones de tráfico de armas están localizadas en el sur de Rafah", ha asegurado en este sentido el funcionario, defendiendo así la decisión del Ejército israelí de atacar la localidad.

Este miércoles, el Ministerio de Sanidad gazatí, controlado por Hamás, informó de la muerte de al menos 75 personas en los ataques israelíes de las últimas 24 horas, incluidos 21 muertos por ataques en los campos de desplazados en el oeste de Rafah.

Más de 36.100 personas han muerto y 81.400 han resultado heridas en el asediado enclave palestino desde que comenzó la guerra, la mayoría -alrededor del 70%- mujeres y niños. Además, se cree que los cuerpos de unos 10.000 desaparecidos se encuentran aún bajo los escombros, sin que los equipos de rescate puedan acceder a ellos.