Juncker ha aclarado que los problemas para caminar y para mantener el equilibrio antes de la cena con los líderes de la OTAN, se debe a un problema de ciática y un calambre que sufrió en la pierna, no por haber ingerido alcohol, y ha pedido "respeto".
El presidente de la Comisión Europea, ha explicado en una rueda de prensa sobre el Plan Europeo de Inversiones que no es la primera vez que le ocurre y que a los problemas de ciática se unieron "bastantes calambres", lo que no hacía "nada fácil la situación".