Un tribunal de Washington ha determinado este martes que Donald Trump no tiene inmunidad presidencial ante la imputación por su intento de revertir la derrota electoral de 2020 e instigar el asalto al Capitolio . Una decisión judicial que acerca el juicio contra el expresidente estadounidense por este caso, que había quedado pospuesto a la espera de que la Justicia dirimiera si gozaba o no de inmunidad.
"A los efectos de este caso penal, el expresidente Trump se ha convertido en ciudadano Trump, con todas las defensas de cualquier otro acusado penal", ha sentenciado la Corte de Apelaciones del Distrito de Columbia, formada por tres magistrados que han rechazado de forma unánime la pretensión del magnate republicano, cuya defensa argüía que no podía ser imputado porque los cargos contra él estaban relacionados con sus responsabilidades como presidente.
"Cualquier inmunidad ejecutiva que pudiera haberlo protegido mientras se desempeñaba como presidente ya no le protege contra este procesamiento", sostiene no obstante la resolución judicial, ante la que es probable que Trump recurra. De momento el caso seguirá en pausa al menos hasta el próximo 12 de febrero, para dar tiempo a Trump para recurrir ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos.
El fallo es un duro golpe para la defensa de Trump, que ha convertido el argumento de la inmunidad presidencial en un arma recurrente para intentar retrasar al máximo el calendario judicial y evitar que coincida con la carrera electoral de las presidenciales de noviembre, en la que parte como el gran favorito para la nominación republicana.
Los argumentos de la defensa de Trump
Esta resolución judicial llega después de que el pasado 24 de diciembre Trump pidiera a la corte de apelaciones que anulara la decisión de un juez de menor instancia que en su momento rechazó las alegaciones de inmunidad esgrimidas por su defensa.
En el escrito al tribunal de apelaciones, el equipo legal de Trump defendió que la acusación era inconstitucional porque los presidentes no pueden ser procesados por la vía penal a menos que antes sean condenados por el Senado. "Bajo nuestro sistema de separación de poderes, el poder judicial no puede juzgar los actos oficiales de un presidente", señalaron los abogados de Trump, que alegaron que el día de los hechos el expresidente cumplía con sus "deberes oficiales" y vigilaba la integridad de las elecciones de 2020.
El pasado viernes, la jueza federal Tanya Chutkan, que lleva el caso del asalto al Capitolio, pospuso la fecha de inicio del juicio, que en principio debía arrancar el 4 de marzo, a la espera de la resolución ahora anunciada.
Las otras causas pendientes de Trump
La del asalto al Capitolio es solo una de las cuatro imputaciones penales a las que se enfrenta Trump en varios tribunales. El magnate republicano está imputado en un tribunal estatal de Georgia por haber encabezado presuntamente una trama mafiosa para alterar los resultados electorales en el estado, donde perdió contra el actual presidente, Joe Biden.
En Nueva York ha sido imputado por supuestos pagos irregulares a la actriz porno Stormy Daniels, con la que había tenido un 'affaire' en el pasado, para comprar su silencio durante la campaña electoral de 2016. En Florida, a su vez, está acusado por sustraer ilegalmente y mantener en su mansión de Mar-a-Lago documentos clasificados que se llevó de la Casa Blanca tras abandonar el poder.
Esta será una semana clave para Trump ya que el Supremo estudiará el próximo 8 de febrero si la Enmienda 14 de la Constitución le inhabilita para participar en los comicios, dado que diversos estados le acusan de haber encabezado una "insurrección" en 2021.