El conservador Kyriakos Mitsotakis ha jurado su cargo este mediodía como nuevo primer ministro griego tras obtener el rotundo respaldo en las urnas de un pueblo heleno que ha dicho estar harto de la política de rescates. "El pueblo griego ha castigado al Gobierno actual", resume una electora griega.
La victoria de los conservadores ha sido arrolladora. Nueva Democracia, curiosamente el mismo partido al que los votantes castigaron en 2015 por aplicar uno de los rescates, ha obtenido casi un 40% de los votos y 158 escaños. La suya es la primera mayoría absoluta de un partido griego desde que empezó la crisis.
"Quiero una Grecia fuerte, con confianza en sí misma, que le reclame a Europa lo que merece y no sea un mendigo o un pariente pobre", afirmó Mitsotakis tras la victoria electoral.
Por su parte, la coalición de izquierda radical Syriza, del hasta ahora primer ministro Alexis Tsipras, se ha quedado a ocho puntos, con 86 escaños. "Nos vamos con la cabeza bien alta", ha asegurado Tsipras.
La sorpresa ha sido la entrada en el Parlamento de Atenas de la formación "patriótica europeísta" del exministro de Finanzas Yannis Varoufakis, con nueve escaños, y de un nuevo partido ultra, Solución Griega, con diez. Fans de Trump, defienden la construcción de un muro y la expulsión de los migrantes no cristianos. Amanecer Dorado, también de extrema derecha, se queda en cambio fuera del hemiciclo