El discurso de Maduro era interrumpido por un dron, y otro impactaba contra un edificio cercano. Unos hechos que han sido calificados por el fiscal general del país, Tarek William Gaab, como "un intento de magnicidio con visos de masacre". Porque los drones iban dirigidos a la tribuna presidencial en la que se encontraban los altos cargos del país.
Inhibidores de frecuencia evitaron que los artefactos cargados de explosivos se acercasen a su objetivo y fueron abatidos por la guardia nacional bolivariana. El grupo armado 'Soldados de Franelas' se ha atribuido la autoría de unos ataques por los que ya hay seis detenidos, todos identificados.
Han sido acusados, según el fiscal general, de "traición a la patria, terrorismo y financiación al terrorismo". Las autoridades venezolanas vinculan a uno de los detenidos con el secuestro de un helicóptero y posterior ataque a edificios oficiales aunque Maduro cree que hay mas partes implicadas.
Aunque el presidente de Venezuela cree que hay más partes implicadas: "La ultraderecha venezolana y el nombre de Juan Manuel Santos están detrás de este atentado". El presidente saliente de Colombia ha negado cualquier vinculación y la oposición venezolana ha usado lo sucedido como pretexto para seguir con la represión policial. En cambio, el ejército ha mostrado su lealtad a un Maduro, que ha recibido el apoyo de miles de ciudadanos que han llenado las calles de caracas.