La huelga de transporte de mercancías peligrosas que ha arrancado este lunes en Portugal ya está afectando al abastecimiento de las gasolineras lusas, por lo que las gasolineras españolas situadas en regiones fronterizas están repletas de vehículos procedentes de país vecino que han acudido allí a repostar.
El paro ha dejado en las primeras horas del lunes 430 gasolineras sin combustible, lo que representa aproximadamente el 15% del total de puestos de repostaje del país.
En Tui (Pontevedra), largas colas de conductores portugueses que explican que allí tienen combustible garantizado y, además, es más barato. Algunos cuentan que ya han parado en alguna estación de servicio que no tenía absolutamente ningún combustible.
"Hay varias gasolineras que están sin combustible", explica Elisabet, que ha cruzado la frontera solo para echar gasolina."Ya no hay, nos fuimos del Algarve y los únicos combustibles que había eran de gasolina y no de gasoil", dice por su parte Mariana.
Otros, como Manuel, que está en Pontevedra de vacaciones y mañana regresa a Oporto, prefieren no arriesgarse:"Como probablemente allí no hay, me voy con el depósito lleno". Además de las gasolineras en las que ya no queda combustible, en otras solo se puede repostar un máximo de 25 litros.
Dos huelgas en apenas unos meses
La huelga, que de momento es indefinida, llega cuatro meses después del anterior paro convocado por el sector, que provocó problemas de abastecimiento en los aeropuertos y el transporte público, y dejó gasolineras secas por todo el país. Ahora, los sindicatos exigen que la patronal cumpla el acuerdo firmado tras aquella huelga, que reconoce aumentos salariales para los transportistas.
El Gobierno portugués ha puesto en marcha varias medidas para mitigar los efectos de la paralización y evitar que se repita el caos de abril. Por ello, el país se encuentra en alerta por emergencia energética.
No obstante, este lunes el primer ministro de Portugal, el socialista António Costa, aseguró que la huelga de transportistas iniciada este lunes transcurre con "enorme civismo y normalidad", y que se están cumpliendo los servicios mínimos. "Hasta el momento la huelga ha transcurrido con normalidad", subrayó.
Aunque a primera hora de la mañana el portavoz del sindicato de transportistas, Pedro Pardal Henriques, anunció que los huelguistas dejarían de cumplir los servicios mínimos, fijados por el Ejecutivo entre el 50% y el 100%, el primer ministro dejó claro que "hasta ahora" se han respetado.
Por lo tanto, agregó, se aleja el escenario extremo previsto por el Gobierno en caso de incumplimiento, que iba desde intervenir la huelga y desplegar a fuerzas de seguridad y militares para conducir los camiones cisterna hasta obligar legalmente a los huelguistas a trabajar.
Son posibilidades previstas en caso de que los transportistas no cumplan los servicios mínimos del 100 % para los servicios prioritarios -como aeropuertos, puertos, servicios de seguridad, bomberos y emergencias médicas-, del 75 % para el transporte público y del 50 % para el suministro general de ciudadanos.