La reunión en Bruselas de representantes de una docena de gobiernos de la Unión Europea, entre ellos España, ha finalizado sin un acuerdo sobre la situación del buque de la Guardia costera italiana 'Diciotti', atracado en el puerto de Catania desde el pasado lunes con más de un centenar de migrantes a bordo, a la espera de recibir autorización por parte de las autoridades italianas para su desembarco.
El encuentro ha estado centrado, tal y como estaba previsto, en la búsqueda de "soluciones estructurales" para los desembarcos de migrantes en el Mediterráneo que eviten situaciones como la producida por el nuevo Gobierno de coalición italiano, que impide que las personas a bordo del 'Diciotti' abandonen el barco hasta que exista un acuerdo entre países sobre la acogida de éstas.
A pesar de que este jueves el ministro italiano de Trabajo, Luigi Di Maio, amenazó con cortar la financiación del país a la UE si Bruselas no daba una solución a la situación del buque, los gobiernos han tratado posibles soluciones a nivel europeo "estables y duraderas" para hacer frente al reto migratorio, por lo que la discusión no ha girado en torno a la búsqueda de una solución para el 'Diciotti' como pretendía Italia, según fuentes diplomáticas.