El avión militar con los restos mortales de Antoni y Dolors, los dos turistas catalanes asesinados por los yihadistas en Túnez, ha aterrizado este viernes en el aeropuerto del Prat de Barcelona. Acompañando los ferétretos también viajaban los hijos del matrimonio asesinado, que han sido recibidos en pista por los ministros de Interior y de Exteriores. El aparato ha seguido camino hacia Valencia, para dejar allí a Juan Carlos y Cristina, la pareja que se salvó después de esconderse en el museo.